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campesina mabel

Las Tunas.- Hoy todos admiran el trabajo que realizan las personas en el campo, pero son pocos los que se atreven a sumarse a esta tarea. Ciertamente es una labor dura y que requiere de mucho esfuerzo, pero también es infinitamente necesaria.

Yamilet Rodríguez Selle, mujer, madre, esposa y productora destacada de la cooperativa de créditos y servicios (CCS) Mártires de Manatí, es una de las valientes que ha decidido dedicarse en alma y vida a trabajar la tierra. Conocida y admirada por muchos, esta mujer de corazón noble, lleva años aportando a la producción de alimentos.

Una tarde me propuse ir a visitarla, observarla mientras hacía su quehacer y charlar sobre su experiencia y conocimiento acerca de la vida en el campo. Me recibió con mucho entusiasmo y disposición de hablar sobre sí misma. Me ofreció un café, nos sentamos en la terraza de su casa y dialogamos un buen rato.

“Yo comencé a trabajar la tierra en el 2010 cuando, junto a mi esposo, pedimos en usufructo por la Ley 259. El terreno estaba lleno de maleza, pero, poco a poco, y con la ayuda de la familia, logramos montar la finca. Antes vivía en una casa en el pueblo, con mi esposo y mis tres hijos; pero nos dimos cuenta de que nuestra alimentación dependía de lo que fuéramos capaces de producir.

“Al principio, la gente nos tildaba de locos, pues el terreno estaba repleto de marabú y la tierra tenía mucha salinidad. Incorporando materia orgánica, le hicimos la conservación al suelo, porque es como un niño que hay que proteger y cuidar. Así le demostramos a las personas que sí se puede, que es como dijo Martí: 'Si el hombre sirve, la tierra sirve'.

“Nuestra finca es integral. Tenemos ganado vacuno, equino, ovino, avícola, cunícola. Además cosechamos yuca, maíz, tomate, quimbombó, frijolito de ensalada, lechuga, zanahoria y remolacha; cumplimos siempre con los planes de la cooperativa, y también con el abastecimiento a centros priorizados como el círculo infantil, el hospital, el hogar materno y la casa de abuelos del municipio.

“Es una granja agroecológica perteneciente al Proyecto Biomás; hace ya más de dos años que todas las siembras que hacemos son con productos orgánicos, nada de químicos, porque es mucho más saludable para el consumo. Por eso, queremos hacer un taller con todos los campesinos del municipio para compartir nuestras experiencias con esta forma de trabajo.

“Yo aquí soy la que atiende la parte cunícula y avícola. También le ayudo a mi esposo en la recolección de semillas. A veces me incorporo al trabajo en la tierra cuando hay que hacer alguna siembra, como de ají o calabaza. Además me encargo de hacerle el parto a los animales.

“Todos hacemos de todo. Mi esposo lo mismo siembra que me ayuda en la cocina. Mis hijos trabajan tanto en la finca como en la casa. Nadie se queda atrás. Nos levantamos bien temprano en la madrugada con el ordeño de las vacas, alrededor de las 5:00 ya estamos de pie. Luego atendemos al ganado y seguido vamos para el sembrado junto a dos obreros más que tenemos. A veces son las 10:00 de la noche y todavía estamos ahí, trabajando”.

Esta trabajadora, como productora destacada en el municipio, y beneficiaria del Proyecto BIOMAS/Cuba, ha participado en dos eventos internacionales sobre agricultura. Recientemente intervino en un intercambio de experiencias con la ONG OmniUnity AC acerca de técnicas biosaludables. Historias así, hacen del campo espacio de luz y porvenir.

“En el 2019, fui a Colombia a un evento relacionado con la agricultura familiar. Aprendí muchísimas cosas: cómo hacer jabón artesanal, acerca de la agricultura circular y el policultivo.

“También el mes pasado estuve en México como invitada de otro evento patrocinado por una ONG, acerca de la permacultura. Allí se dice que lo cubanos somos los mayores permacultores del mundo, porque todo lo reciclamos y todo lo aprovechamos, estamos preparados para cualquier cosa.

“A los jóvenes quiero decirles que hay que sumarse a la tierra y ayudar en la producción de alimentos para el pueblo, porque se sabe que es una labor difícil pero necesaria. Y a los campesinos que no se rindan, que de nosotros depende, en gran medida, el desarrollo sostenible de nuestro país".