Las Tunas.- No resulta exagerado afirmar que el alza de pacientes con dengue constituye hoy motivo de desvelos en Las Tunas, en medio de una batalla que no ofrece respiros; en la que el enemigo, el mosquito Aedes aegypti, multiplica sus poblaciones.
La doctora Viviana Gutiérrez Rodríguez, directora de Salud en la provincia, explicó que la estrategia para revertir el actual panorama incluye el aislamiento oportuno de los enfermos y el bloqueo de casos. Sin embargo, dijo, se han identificado deficiencias en las pesquisas y en el ingreso domiciliario.
En todo el territorio persisten los elevados índices de infestación del vector y la incidencia de la enfermedad, principalmente en Puerto Padre, Majibacoa, Manatí, Las Tunas y "Amancio". Hacia esos lugares en los que se reportan las mayores complejidades se encaminan las labores de tratamiento focal y adulticida.
Durante la última semana se reportan 87 locales cerrados, ubicados en Manatí, "Jesús Menéndez", Jobabo y Bartle. Ante esta realidad, urge que los operarios acudan nuevamente a esos sitios a realizar la inspección sanitaria, y así evitar brechas que impidan detectar los focos de manera oportuna.
Gutiérrez Rodríguez insistió en la necesaria contribución de los organismos para eliminar los riesgos medioambientales, así como el apoyo de los tuneros, pues la mayor focalidad se encuentra en las viviendas y sus alrededores. Asimismo, alertó sobre la circulación de diferentes serotipos de dengue, lo que incrementa el peligro de complicaciones.
El éxito de la ofensiva depende de la responsabilidad colectiva, de otra manera no se logrará el control epidemiológico con todo lo que implica para Salud y también para la economía del país. Lo más sensato y oportuno es acabar con el Aedes aegypti y aislar al enfermo para cortar la transmisión.
