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alevines

Manatí, Las Tunas.- Incrementar el Programa de la Acuicultura, hasta llevarlo a su máximo potencial, es la misión que hoy acompaña al sector pesquero en esta oriental provincia cubana. Inmersa en un proceso inversionista para ampliar sus horizontes, la estación de cultivos de especies acuícolas Manatí (Alevitun), recupera infraestructuras y espacios existentes, con el objetivo de lograr un despegue en dicho universo para el próximo calendario.

A partir de la búsqueda de alternativas locales, en el enclave se avanza de manera constante para producir peces de agua dulce. Así lo informa Zulema Arévalo Alonso, directora de la entidad, quien enfatiza que para el logro de los resultados no solo es importante las buenas condiciones de los depósitos, sino también la precisión en los requerimientos técnicos específicos por etapas, para garantizar el correcto cultivo. “Los estadios iniciales marcarán el progreso de los alevines, devenidos posteriormente en especies listas para su incremento y comercialización”, recalcó.

Foto 2 Zulema centro de alevinaje Zulema Arévalo Alonso, directora de la Estación.Valorado como un centro de alevinaje pequeño, formado por 10 hectáreas, con 40 estanques de tierra y 58 piscinas de hormigón, este sitio incursiona con muy buenos rendimientos en el cultivo intensivo de tilapia y colosomas. Además, aseguran el fomento de claria y el alevinaje de ciprínidos, como carpas chinas y tencas, destinadas fundamentalmente, a los embalses que explota la acuicultura de la Empresa Pesquera en diferentes regiones de la provincia.

“La experiencia con la tilapia ha motivado a todo el colectivo. Es asombroso ver el rendimiento de nuestras producciones, pues con muy poca experiencia logramos que varios ejemplares alcanzaran un peso de más de un kilogramo, empeños que propiciaron un real de 20 toneladas, cuando los pronósticos eran de 10. De los colosomas no conocíamos mucho hasta ese momento -confiesa Zulema-, sin embargo, nos concentramos en atenderlas con eficiencia y de las cinco toneladas planificadas se obtuvieron más de seis.

CRECEN LOS ALEVINES Y LAS PROYECCIONES

foto 3 produccionesCrecen las producciones de viandas, hortalizas y granos en los perímetros de la estación acuícola.Una brigada de la unidad empresarial de base Desmonte y Construcción, perteneciente al Grupo Empresarial de Logística del Ministerio de la Agricultura (Gelma), se encuentra en la reconstrucción del área. Adyacentes a los espejos de agua, en dos hectáreas en desusos por varios años, tienen previsto ampliar los estanques. “Con mucha prioridad, a pesar de las afectaciones que tuvimos en días pasados causadas por la Covid-19, estamos intencionando esta tarea. Va a buen ritmo, a fin de que en el período óptimo ya se pueda iniciar el cultivo en ese sitio”, avizora Arévalo Alonso.

Estos empeños también se revierten en otros programas para la producción de alimentos. La disposición para lograr un autoabastecimiento de algunos surtidos ya gana adeptos por estos lares; todo el colectivo se vuelca a este fin y ya se alcanzan resultados notables.

“Sin dudas, se ha mejorado mucho la alimentación de los trabajadores. Tenemos sembrado tomate, obtuvimos 62 quintales de frijoles este año y no solo los consumimos en el comedor del trabajo, también pudimos llevar hasta nuestras casas para la familia -enuncia-. Ya no sabemos estar aquí sin frijol, se ha convertido en nuestro segundo tesoro y en este año vamos a sembrarlo otra vez para que esté listo en los meses venideros”.

Junto a las viandas y hortalizas frescas que ya cosechan, ahora incursionan por primera vez en la siembra de arroz. “Tenemos listas las condiciones, la buena semilla y auguramos altos resultados en este alimento”.

ESTACIÓN ADENTRO, PROEZAS DE SUS PROTAGONISTAS

La Empresa Pesquera en Las Tunas es reconocida como la mejor de su tipo a nivel nacional durante dos años consecutivos y el colectivo de la estación acuícola ha contribuido en estos empeños. La gran mayoría del personal es joven, con mucha responsabilidad, voluntad y deseos de trabajar.

“Prácticamente estaban desvinculados del trabajo y aquí han encontrado formación, remuneración económica y lo más importante, una gran familia, porque así nos sentimos todos”, manifiesta orgullosa y con la alegría dibujada en sus ojos, Zulema.

alevines 2“Durante los tiempos más difíciles de pandemia resaltaron su valía y pusieron por encima de sus intereses personales las necesidades colectivas. No se abandonó ni un instante la atención a los alevines y un puñado de trabajadores permanecieron aquí en el centro por varios días consecutivos y fueron capaces de dejar atrás sus deseos de descansar en casa y compartir con los suyos, con su familia, para estar en el alevinaje y no dejar de alimentar a los peces. El colectivo sabe que el pueblo también espera de ellos y ante el coronavirus, el deber de producir era aún más importante”, explicó la directora.

Iris Mendoza Espinoza, a cargo del área de claria y tilapia, es una mujer inmensamente ligada a estos reservorios de agua dulce. Su jornada la cumple con el debido cuidado, pues su responsabilidad garantiza el eficiente crecimiento de las especies.

“Pese a las afectaciones de la pandemia el trabajo no cesó. En cada jornada nos desdoblamos para que ningún pez, ni nuestras producciones agropecuarias quedaran desprotegidas. La labor es compleja, difícil, sacrificada; los horarios de alimentación tienen que cumplirse rigurosamente y a la vez tenemos que estar atentos a cualquier detalle para que todo el proceso marche bien”, destacó Iris.

“Nuestro objetivo fundamental es garantizar la comida del pueblo, cada día esa motivación hace que me sienta más responsable y me guste mi trabajo. Con más de 30 años aquí, siempre laboro dispuesta y tratando de dar lo mejor para obtener los resultados planificados y mucho más, que es lo que necesita el país en estos momentos. Esto es lo nuestro y hay que defenderlo y si queremos mejorar los alimentos, tenemos que producirlos nosotros mismos”, aseguró.

foto 4 Iris alevitunIris Mendoza Espinoza, a su cargo el área del claria y la tilapia. Un plausible esfuerzo en bien de la soberanía alimentaria se reconoce en la estación de cultivo. Mejorar las condiciones de los estanques existentes y ampliar las capacidades en otros perímetros coadyuvan a potenciar el desarrollo de los peces de agua dulce. Las metas están claras: producir más alimentos y mejorar el Programa de Autoabastecimiento local, dos encomiendas por las que ya navega, y con creces, el colectivo de Alevitun, en el norteño municipio de Manatí.

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