Las Tunas.- Al cierre de este 7 de diciembre, los apicultores de la provincia de Las Tunas acumulan 513,8 toneladas de miel de abeja, por lo que sobrecumplieron su plan técnico económico, aunque están decididos a mantener el acopio de ese producto hasta el último día del calendario.

La idea es -según Waldo Torres Stoll, director de la unidad empresarial de base (UEB) Apícola- continuar la recolección para honrar el compromiso de llegar a 75 toneladas en el mes y contribuir a la economía del país, por ser este uno de los principales renglones exportables.
Los motiva también la posibilidad de convertir al territorio tunero en referencia en el desarrollo apícola y el inminente establecimiento de un nuevo récord histórico de la entidad, que superaría el vigente desde el año 2016, cuando se alcanzaron 514,8 toneladas.
Tradicionalmente, diciembre ha sido un buen mes para la actividad, porque es la época de floración de la campanilla blanca, y con esa planta las abejas elaboran una de las mieles preferidas por los compradores y consumidores debido a sus bajos niveles de humedad, alta transparencia y magnífico sabor.
Por tanto, es de esperar que los apicultores locales regalen buenas nuevas, tanto a la UEB como a la provincia y el país, pues restan jornadas para concluir el año y en los ocho municipios se contabilizan unas 10 mil 700 colmenas productivas.
El actual resultado se dedica al triunfo de la Revolución Cubana, en su aniversario 63, y se acompaña de varias acciones en la capacitación sobre el manejo de los apiarios, la prevención de enfermedades y el paulatino incremento de la flora melífera.
Junto a la producción de miel de abejasy a pesar de las afectaciones por la Covid-19, la UEB tunera ha priorizado la obtención de cera y propóleo, e inauguró en el mes de abril una unidad comercializadora en la que se expenden varios renglones.