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clima rey
Las Tunas.- De plácemes están las personas calurosas que residen en la provincia de Las Tunas por estos días, porque -al fin- después de tantos meses de intenso calor, la naturaleza ha regalado al territorio varios días consecutivos de temperaturas ligeramente frías.

Sin embargo, para los friolentos ha sido difícil y han puesto en práctica un viejo y sabio refrán que dice que en enero debemos usar bufanda, capa y sombrero. En las calles se les ve "forrados", como decimos los cubanos, con enguatadas, abrigos, medias y hasta guantes en las manos.

Diversas condiciones hacen creer que es mucho el frío; pero, hasta ahora, la temperatura más baja del actual invierno fue de 17,2 grados Celsius, reportada en la madrugada del 29 al 30 de enero en esta ciudad, según informó el máster en Ciencias Alexey Moreno Borges, subdirector del Centro Meteorológico.

Agregó Moreno Borges que la próxima amanecida debe ser muy fresca en los ocho municipios tuneros y que luego comenzarán a subir paulatinamente las temperaturas, aunque se mantendrán las características propias de esta etapa del año.

Acotó que en la actual temporada invernal en nuestra área geográfica se han formado nueve frentes fríos y de ellos, solo cinco han afectado a la región oriental del país. Hasta esta zona llegan, la mayoría de las veces, en estado de disipación por lo que su influencia es débil.

Aunque muchas personas insisten en que viven sus días más gélidos, los valores absolutos de temperaturas mínimas en el territorio se registraron hace muchísimos años.

En la ciudad de Puerto Padre, el 21 de enero de 1977, los termómetros indicaron 7,4 grados Celsius; mientras en la cabecera provincial marcaron 8,1, casualmente, también un 21 de enero, pero de 1971. Desde entonces ha transcurrido más de medio siglo.

Como el invierno casi comienza, muchos calurosos saldrán a la calle para sentir la brisa fresca que les haga olvidar las jornadas veraniegas; y los friolentos apurarán sus pasos para llegar a las casas, escuelas o centros de trabajo, en busca de cuatro paredes que los amparen.