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vicepresidente del Comité de Asuntos Internacionales del Consejo de la Federación (Senado ruso), Vladímir Dzhabárov

Moscú.- El vicepresidente del Comité de Asuntos Internacionales del Consejo de la Federación (Senado ruso), Vladímir Dzhabárov, señaló hoy que Estados Unidos trama una provocación que empuje al Gobierno ucraniano a enfrentarse con Rusia en Donbass.

En su opinión, los pasos de Washington, tales como el anuncio sobre la evacuación del personal diplomático y las recomendaciones para sus ciudadanos de no visitar Ucrania, están apuntados a provocar psicosis en Ucrania, reportó la agencia de noticias Sputnik.

El senador ruso recordó que el Pentágono informó la víspera que prepara el traslado a Europa de ocho mil 500 militares estadounidenses para fortalecer la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

“Si Estados Unidos envía militares, le aconsejo pensar, en primer lugar, en cómo los va a retirar, para que no suceda como en Kabul, de donde tuvieron que huir”, indicó Dzhabárov.

Desde abril de 2014, Ucrania lleva a cabo una operación contra las milicias en la región del sureste del país, donde se proclamaron las repúblicas populares de Donetsk y Lugansk, en respuesta al violento cambio de Gobierno ocurrido en febrero de ese año.

Rusia ha reiterado que Ucrania incumple los acuerdos de Minsk de 2015, mecanismo aprobado para la búsqueda de una solución pacífica al conflicto interno, y alertó sobre un posible intento de resolver el problema por la fuerza.

Moscú denunció que Kiev envió a Donbass la mitad de sus efectivos y manifestó su preocupación por el traslado del material militar de la OTAN hacia las inmediaciones de la frontera rusa y el aumento del número de los instructores militares en esa región.

La Cancillería rusa alertó además que el suministro de armas a Ucrania incita a Kiev a utilizar la fuerza para resolver el conflicto.

Ante tal situación, Rusia respondió con el traslado de tropas dentro de su territorio hacia las inmediaciones de esa parte de la frontera ucraniana, lo cual Occidente calificó de preparativos para una posible invasión.

Las autoridades de este país han defendido de manera pública el derecho soberano a mover fuerzas dentro de su espacio nacional, según lo estime conveniente, y acusó a la OTAN de utilizar esa acción como excusa para emplazar más equipamiento militar cerca de las fronteras rusas.