Las Tunas.- Desde hace muchos años, cuando se habla de buenos ejemplos en la producción de alimentos, hay que mencionar a los integrantes de la cooperativa de créditos y servicios (CCS) Sabino Pupo Milián, de la comunidad de Pedernales, en el municipio de Amancio. 

Esta unidad, con una superficie total de mil 342 hectáreas, ha cumplido sistemáticamente sus planes productivos, a partir de una importante integración entre sus miembros y de las acciones que realizan los campesinos para beneficio colectivo.Foto: De la autora.

La misión fundamental de la cooperativa es el fomento de la ganadería, según explicó su presidente, Omelio Castellanos Carmona, quien agregó que durante el pasado año el plan de acopio de leche era de 350 mil litros y entregaron unos 500 mil.

“Esto fue posible porque contamos con seis termos de refrigeración que diariamente conservan más de cuatro mil litros. No toda esa cantidad es nuestra, también prestamos dicho servicio a otras cooperativas de los alrededores.

“Además, se ha incrementado ese rubro, porque damos atención diferenciada a la gestación de las hembras. Practicamos la inseminación artificial y cuando no ha sido posible hemos propiciado la monta directa con sementales que adquirimos.

“El plan de la carne era de 92,8 toneladas, pero entregamos más de 125. También crecemos en la siembra de pastos y forrajes para la alimentación del ganado, especialmente con caña y king grass”.

La cooperativa está en una zona en la que apenas llueve. Sin embargo, el efecto de las precipitaciones, más el paso del tiempo, lastimaron profundamente el camino rural que enlaza las fincas y áreas colectivas.

Ante esa situación, los asociados emprendieron la recuperación de la vía y repararon 4,8 kilómetros para facilitar el traslado de la leche, los animales y otras producciones. Costó más de 4,5 millones de pesos, los que se pagarán entre la unidad y los campesinos.

En correspondencia con la necesidad de aportar más alimentos para la población, se diversifican las producciones hacia los cultivos varios, con énfasis en las viandas y hortalizas.

“Cada asociado dispuso de un área y se comprometió a entregar una tonelada. Esa es otra meta que tenemos y que pensamos cumplir en el 2022, con el aprovechamiento de todas las parcelas y empleando materia orgánica para lograr mejores rendimientos.
“No nos detendremos y seguiremos trabajando para garantizar más comida al pueblo”.