Las Tunas.- Hablar del primer amor se torna complicado. Muchas veces anda extraviado en el verano de hace algunos años, el patio de la escuela o en palabras que nunca fueron dichas, miradas y silencios.
En la adolescencia, el capítulo de la vida en el que suele ocurrir, estamos constantemente expuestos a nuevas experiencias y aunque las primeras veces siempre son muy importantes, eso de que el primer enamoramiento es insuperable no pasa de ser un cliché.
La ciencia ha demostrado que las reacciones fisiológicas que desencadena enamorarse son las mismas en cualquier etapa y tantas veces como ocurra, pero la industria cinematográfica y del consumo en general ha hecho mucho mercado con los primeros besos, las salidas románticas y las bodas de ensueño, provocando una idealización de la que cuesta separarse.
Apartando la vista de las pantallas que nos muestran "situaciones ideales" es preciso destacar que, en la realidad, el rosa tiene muchos matices.
Christian no fue el primer amor de Niurvis, lo conoció hace ya bastante tiempo. Recuerda que una noche tuvieron la oportunidad de sincerarse, ahí supieron que el sentimiento era mutuo.
Él estuvo a su lado durante los días más complejos de su existencia, un compromiso difícil de sostener en plena juventud, cuando los amores también van a prisa.
Con apenas 18 años de edad le fue detectada una de las variantes del linfoma de Hodgkin, enfermedad que requiere ser tratada con largas sesiones de quimioterapia. Al instante de conocer su condición, le pidió que si quería alejarse de ella, ese era el momento.
Conocía los rigores físicos y el impacto emocional que implicaba el proceso por venir. Sentía que si iban a terminar la relación debía ser antes de comenzar el tratamiento. "No iba a estar de ánimos para salir a pasear, pasar tiempo juntos como acostumbrábamos y ni siquiera podríamos hacer el amor".
Christian no dudó en afirmarle que estaría a su lado a pesar de todo, acompañándola y ayudándola a hacer más llevadera aquella batalla. Y lo hizo. Actualmente, la terapia ha tenido buenos resultados y su salud se restablece.
Él ahora no está en Cuba, aun así, sostienen su relación. Luego de enfrentar juntos el cáncer, no hay distancias infranqueables.
