Imprimir
Visto: 999

Humboldt 7

La Habana.- Como parte de una cacería a los asaltantes del Palacio Presidencial de Cuba, hace hoy 65 años, la policía localizó y asesinó a cuatro jóvenes revolucionarios, escondidos en un apartamento de esta capital.

De acuerdo con documentos históricos, la masacre ocurrió en el dificio número 7 de la calle Humboldt, en la barriada del Vedado y había transcurrido un mes del ataque al Palacio Presidencial y la emisora Radio Reloj (13 de marzo de 1957).

Con ambos asaltos dirigidos por el Directorio Revolucionario y liderados por su figura principal José Antonio Echeverría, los jóvenes estudiantes buscaban el fin de la dictadura de Fulgencio Batista, quien desde el golpe de Estado de 1952 manejaba el país de forma corrupta y represiva.

Sobrevivientes de aquella acción fallida: Fructuoso Rodríguez (24 años de edad), Juan Pedro Carbó Serviá (31), José Machado Rodríguez (Machadito, 24) y Joe Westbrook (20) se escondieron en casas de seguridad luego de la búsqueda desatada por la policía.

Debido a una delación, el capitán Esteban Ventura llegó hasta el edificio de Humboldt 7 con los efectivos suficientes para rodear y sorprender a los muchachos.

Según testimonios de la época, Carbó trató de huir por el elevador y fue ametrallado con saña, mientras que Joe Westbrook saltó a un apartamento del primer piso y se quedó sentado en la sala junto a su vecina como si fuera un visitante, pero resultó descubierto e igualmente asesinado a quemarropa.

Fructuoso y Machadito lograron correr hasta el final del pasillo y saltar por una ventana.

Sin embargo, la caída de ocho metros provocó que el primero yaciera inconsciente y el segundo quedara con sus tobillos quebrados, incapaz de moverse. Ambos fueron ultimados con ráfagas de subfusil Thompson.

Los cuatro jóvenes fueron arrastrados por el pelo desde el lugar donde los asesinaron hasta la acera frente al edificio, los exhibieron por unos minutos y los lanzaron sobre un camión.

En Cuba esta masacre se recuerda como uno de los peores crímenes de la dictadura de Batista y cada año la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) rinde homenaje a estos jóvenes revolucionarios.