Imprimir
Visto: 1853

SoberanaPlusRefuerzoLas Tunas

Las Tunas.- La noticia de una nueva campaña de vacunación contra la covid-19 en el comienzo del 2023 confirma lo decisivo que ha sido la existencia de esos inmunógenos para que el país, y también esta provincia del oriente cubano, hayan logrado mantener bajo control al SARS-CoV-2.

Mientras otras naciones con un poderío económico inmensamente superior yacen arrodilladas ante el empuje del nuevo coronavirus, el examen de cómo evolucionó aquí la pandemia en casi tres años corroboran que el único modo de detenerla es la aplicación masiva de vacunas de una probada efectividad, como lo son las elaboradas por la Industria Biotecnológica doméstica. Las Tunas no ha sido la excepción.

En el 2020 el confinamiento mantuvo a la enfermedad dentro de límites tolerables para un Sistema de Salud vulnerable desde el ángulo de la disponibilidad de recursos. Sin embargo, cuando en el 2021 se flexibilizaron esas pautas, la prevalencia de variantes más contagiosas y letales del virus provocaron el primer gran rebrote que puso contra las cuerdas a la nación con niveles críticos de transmisión y fallecidos. En el Balcón de Oriente, ese año acapara más de la mitad de todos los positivos, autóctonos e importados.

variantes SARS Cov 2 CUba 2020 2022Echando una mirada al comportamiento por meses en cada uno de los años de la enfermedad aquí, es evidente que la intensidad de la transmisión es inversamente proporcional al porcentaje de vacunación. Cuanto más se elevó el segundo, el primero cayó en picada. El ejemplo más nítido fue a comienzos del 2022 cuando la pandemia fue detenida en seco, con una nueva ofensiva de inmunización. Ese stop se notó, además, en la cantidad de pacientes cuya muerte se certificó por covid-19, pues luego de números tristemente altos entre agosto y octubre del 2021 y un incremento en el primer trimestre del 2022, no se ha notificado muerte alguna por esa causa en Las Tunas desde marzo del pasado año.

Los pasos futuros de Cuba frente a esta enfermedad irán por la cuerda de la prevención. Por eso, el Ministerio de Salud Pública (Minsap) informó que se comenzará a aplicar dosis de refuerzo con nuestras vacunas a "embarazadas del último trimestre de gestación que seis meses antes recibieron su última vacuna, así como a mujeres que todavía lactan a sus bebés. También será nuevamente protegida, añadió, la población de riesgo, la mayor de 70 años de edad, en tanto se completará la segunda dosis de refuerzo a las personas entre 19 y 48 que no la han recibido. En todos los casos, aclaró, solo podrán ser vacunados si han transcurrido seis meses de la anterior aplicación".

Mientras, el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba (CIGB) anunció que comenzará a aplicar a grupos poblacionales potencialmente vulnerables al SARS-CoV-2 el Nasalferón, un medicamento antiviral, inmunomodulador y profiláctico.

El Minsap finalmente instó a la ciudadanía a "respetar el aforo y mantener el distanciamiento físico en lugares donde se realicen actividades que impliquen concentración de personas, al tiempo que recomendamos mantener el uso del nasobuco en esos casos y también cuando se asista a actividades en espacios cerrados"; y que "no se debe acudir al trabajo, la escuela o eventos sociales si se presentan síntomas respiratorios. Estamos, concluyó, en la obligación de extremar medidas de vigilancia y aislamiento en los hogares de ancianos, casas de abuelos, círculos infantiles y otras instituciones donde comparten grupos de personas que además pudieran ser vulnerables a la enfermedad".

Covid 19 Las Tunas 2020 2022