Las Tunas.- Tres décadas después de su fundación como institución universitaria independiente, la Universidad de Las Tunas (ULT) celebra su aniversario con orgullo. Sin embargo, los orígenes de la Educación Superior en el territorio se remontan medio siglo atrás, al período lectivo 1970-1971, con la apertura de un curso preparatorio para carreras tecnológicas, impulsado por Faure Chomón bajo orientaciones del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz.
En 1971, se estableció la carrera de Licenciatura en Economía, gestionada por la Universidad de Oriente. Luego, en 1974, surgió la primera unidad docente tunera, como filial de la Universidad de Holguín. Durante años, el Balcón de Oriente se apoyó en otras provincias para garantizar la formación superior: Holguín y Manzanillo; Granma en lo pedagógico y Camagüey en lo técnico.
DECLARACIÓN DE INDEPENDENCIA
El 15 de mayo de 1995 se crea el centro universitario Vladímir Ilich Lenin, directamente adscrito al Ministerio de Educación Superior. Por primera vez, el territorio cuenta con un rector propio y la potestad de firmar títulos universitarios. Ese liderazgo inicial estuvo a cargo del doctor en Ciencias José Musa Simón, quien condujo los pasos fundacionales.
Las primeras carreras fueron Ingeniería Agrónoma y Contabilidad y Finanzas. Cultura Física también se impartía, aunque en coordinación directa con el Inder, hasta su posterior integración al plantel.
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Al cabo de seis lustros de ejercicio, la entidad suma 29 mil 125 profesionales graduados en 30 carreras, de las cuales ocho están acreditadas, cuatro programas de ciclo corto, 20 programas académicos activos y la formación de 183 doctores en Ciencias, lo que evidencia su impacto en la revolución educativa.
Sus actuales cinco mil 310 estudiantes, más de mil 200 trabajadores, siete centros universitarios municipales (CUM) y 86 proyectos de investigación en curso hablan de su intención de ser faro del saber y motor del desarrollo local.
Han sido empeños construidos día a día, imponiéndose a circunstancias alejadas de lo ideal; por eso el aplauso tiene todo el sentido. "Arribar a estos 30 años de consolidación de la Educación Superior en suelo tunero realmente es motivo de júbilo para la comunidad universitaria de la provincia", precisó con mirada luminosa la rectora, Yoenia Virgen Barbán Sarduy.
TENER VOZ PROPIA
La Universidad de Las Tunas ha sabido pasar de ser una extensión de otras entidades educativas a constituirse en actor central del desarrollo social, científico y económico de la provincia, construyendo en ese camino una identidad académica propia.
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En la ruta vivida, uno de los hitos más significativos ocurrió en el 2019, como lo recuerda Aurora Ramos de las Heras, exrectora de la ULT. "El momento más trascendental que marcó ese avance fue recibir y aprobar la evaluación institucional por la Junta de Acreditación Nacional; proceso en el que participaron, con entusiasmo y compromiso, toda la comunidad universitaria y las instituciones del territorio vinculadas al centro.
"Fueron muchísimos los desafíos que enfrenté en los casi nueve años que estuve al frente de este sitio entrañable. Uno de los más complejos fue conducir el proceso de integración de la universidad Lenin con la de ciencias pedagógicas Pepito Tey, en septiembre del 2015, un paso estratégico para la consolidación del sistema de Educación Superior en la provincia.
"También resultó especialmente retador llevar adelante la evaluación y acreditación de nuestras carreras y programas. Cada paso exigía preparación, autocrítica y visión de futuro.
"Y, sin dudas, uno de los capítulos más duros y a la vez más nobles fue la pandemia de la covid-19. La ULT se convirtió en bastión de apoyo: habilitamos dos hospitales de campaña en nuestras instalaciones y garantizamos, con personal universitario, los servicios en zona roja, lavandería, limpieza y la cocción de alimentos. Experiencia que evidenció el valor humano y el compromiso social de nuestro plantel".
LA FORMACIÓN, MANDATO INFINITO
Uno de los mayores logros es el doctorado en Ciencias de la Educación, calificado como programa de excelencia y que ya ha entregado a la sociedad tunera 183 doctores, cifra que resalta su fortaleza investigativa.
Mientras otros profesionales a ese nivel en áreas como Ciencias Técnicas o Económicas se han graduado en instituciones externas, esta formación local representa un capital humano invaluable para la tierra de Vicente García.
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Barbán Sarduy aprecia tan valiosa herencia profesional y otras antecesoras. "Nutrirnos de toda esa experiencia y experticia que por años se han acumulado aquí, en la conducción de la Educación Superior, nos permite a las nuevas generaciones seguir preparándonos".
Al propio tiempo, en otros lares de la geografía provincial se ha impulsado ese espíritu de superación, al mantenerse activa desde hace más de 20 años la red de los CUM. Surgidos en el 2002 y consolidados en el 2010, estos recintos continúan operativos, a diferencia de otras zonas del país que optaron por centralizar la Enseñanza Superior.
En su quehacer han generado impactos notables en las demarcaciones, sobre todo en la formación profesional y científica in situ. Un ejemplo emblemático es el de "Jesús Menéndez", considerado referente nacional por su gestión de proyectos de desarrollo local.
ALIANZA ESTRATÉGICA PARA EL PROGRESO
La Universidad de Las Tunas ha fortalecido su vínculo con los sectores productivos, sociales y gubernamentales del territorio. Hoy no existe institución provincial que no cuente con su respaldo para planificar, desarrollar o ejecutar iniciativas de impacto.
Esta sinergia, como alerta la rectora, ha elevado su rol de agente de transformación, así ha incrementado su pertinencia y consolidado su reputación como ente de referencia.
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José Ignacio Reyes González, doctor en Ciencias Pedagógicas y presidente de la Comisión de Grados Científicos de la ULT, remarca: "En un contexto complejo, que sigamos desplegando el proceso formativo de profesionales para nuestra provincia genera orgullo en el claustro y sus directivos".
Actualmente, la institución cuenta con 20 programas de posgrado activos: un doctorado, 17 maestrías y dos especialidades. Estas opciones permiten la actualización continua del talento existente, respondiendo a las necesidades del desarrollo local.
Asimismo, en su apuesta por la ciencia aplicada, la Universidad transformó el antiguo Centro de Estudios de Eficiencia Energética y Procesos Tecnológicos (Ceeprot) en una Unidad de Desarrollo e Innovación especializada en eficiencia energética.
Desde allí se lideran investigaciones claves, algunas con financiamiento internacional, que han permitido la adquisición de modernos equipos de medición y análisis, lo que permitirá aportar soluciones sostenibles a problemáticas energéticas del territorio.
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Al respecto, Reyes González resalta el papel estratégico de la ciencia en múltiples frentes: "Todas las facultades tienen proyectos de investigación que responden a los problemas de la sociedad. Destacan los relacionados con el desarrollo agrícola, la educación ambiental, la salud y la sexualidad, la búsqueda de alternativas energéticas y los estudios contables y económicos. Ya hay una cosecha de resultados científicos con beneficios para Cuba".
HACIENDO HISTORIA Y FUTURO
Treinta años después de su fundación como plantel independiente, la Universidad de Las Tunas no solo ha crecido en tamaño, infraestructura y matrícula. Ha crecido en visión, madurez institucional y compromiso con su pueblo.
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Barbán Sarduy resume así ese recorrido y la esperanza en el porvenir: "Yo soy de la novena generación de rectores que ha pasado por la Educación Superior, y estos 30 años también nos han permitido honrar la historia y mirar con responsabilidad el futuro".
Al tiempo que quien estuvo antes, Ramos de las Heras distingue una meta clara: "Mi visión de futuro de nuestro centro es una universidad más pertinente y con la condición de certificada".
Así, con raíces que se extienden a más de medio siglo, esta casa de altos estudios es un ente del saber que hace historia, transforma, acompaña y lidera.