Las Tunas.- Sin terminar aún la etapa más aguda en el enfrentamiento a la pandemia del nuevo coronavirus es importante ya su repercusión en el esquema laboral del sector estatal de esta provincia del oriente cubano, indican las estadísticas de la Dirección Provincial de Trabajo y Seguridad Social.
El conjunto de medidas adoptadas por el Gobierno cubano para garantizar el distanciamiento físico potenció el trabajo a distancia y el teletrabajo, mientras otra cuantía de empleados estatales debieron reubicarse dentro de sus propias entidades o fuera de estas, todo a fin de mantener cierto grado de actividad económica. Sin embargo, algunos forzosamente paralizaron sus labores, aunque sujetos a una protección salarial, el primer mes con la totalidad del sueldo y luego con el equivalente al 60 por ciento de este. Bajo un esquema similar, otros permanecieron en sus casas para cuidar a niños y niñas ante el cierre temporal del Sistema de Educación.
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Este reajuste del régimen laboral estatal aquí impactó sensiblemente en las empresas e instituciones de rango local, pues casi 30 mil de sus trabajadores se acogieron a alguna de las modalidades ya descritas. Es, sin dudas, la masa más amplia, al incluir a quienes laboran en sectores tan diversos como Transporte, Cultura, Deportes, Educación, Comercio, las manufacturas y Construcción, por solo mencionar algunos.
Dentro de las empresas o instituciones subordinadas directamente a ministerios o grupos empresariales nacionales, las repercusiones más significativas se notan en las pertenecientes al Ministerio de la Educación Superior, con dos mil 345 trabajadores incluidos en alguna de las modalidades. En el otro extremo aparecen las pertenecientes al grupo empresarial Cubanacán, en el que ninguno de sus empleados trabaja a distancia, teletrabaja, tampoco está reubicado o ha dejado de laborar por culpa de la Covid-19. Significativamente, en entidades adscritas al Ministerio de Salud Pública solo 20 trabajadores vieron alterar algo su régimen de labor, al ser colocados en otros puestos.
Visto desde el ángulo de a qué tipo de modalidad se han acogido los trabajadores, se nota que son las empresas o instituciones de subordinación local en su conjunto las que tienen la mayor cantidad de empleados trabajando a distancia: 27 mil 921 para ser exactos. Curiosamente, dentro de las entidades de subordinación nacional son las adscritas al Ministerio de la Agricultura las que exhiben cifras mayores de trabajadores a distancia: mil 768, seguidas de las universidades con mil 256.
Entre los “teletrabajadores”, los pertenecientes a la Educación Superior marcan ampliamente la delantera con 802, pues quienes le siguen, salvo los de subordinación local que suman 291, no superan los 200, como es el caso de la Empresa de Flora y Fauna o Etecsa con 70.
Según la Dirección Provincial de Trabajo y Seguridad Social la cantidad de empleados estatales que pasaron al trabajo a distancia y teletrabajo, a raíz de la actual pandemia, creció ampliamente con respecto a la existente a finales de año, cuando ya regía la indicación gubernamental de que ambas modalidades debían ser incentivadas para afrontar el deterioro del panorama económico doméstico por el recrudecimiento del bloqueo estadounidense. Convendría tener en cuenta ese detalle ahora que los engranajes institucionales evalúan qué se quedará de lo hecho para enfrentar esta situación epidemiológica extrema.