
Las Tunas.- Un desastroso quinto episodio, donde el bulpén leñador fue vapuleado por la ofensiva local, marcó la derrota 7-13 de Las Tunas ante Cienfuegos en el estadio 5 de Septiembre. A pesar de un comienzo alentador con un cuadrangular de Yudier Rondón, la cuadrilla tunera (43-23) no logró concretar la remontada.
El partido se torció definitivamente en la quinta entrada. Con el juego 3-2 a su favor, el mando tunero tomó la decisión de relevar al abridor Eliánder Bravo, quien volvió al montículo tras varios días aquejado de las arbovvirosis. Los relevistas Yoelkis Cruz y Alexis Batista no pudieron contener el aluvión ofensivo de los Elefantes, combinando bases por bolas e imparables. El punto de quiebre fue un demoledor triple de Inasay Ramírez que limpió las bases y catapultó el marcador a 8-3 para Cienfuegos. El relevo, otrora fortaleza del equipo, aceptó siete carreras en apenas 1,1 entradas, un lujo que no se puede permitir en la recta final de la temporada.
A pesar del descalabro colectivo, el juego dejó una luz ofensiva para los visitantes: Yudier Rondón. El tunero demostró su poder con dos jonrones, uno solitario en el primer inning y un grand slam en la quinta entrada que, por un momento, devolvió la esperanza al cuadro visitante. Sus cinco carreras impulsadas fueron, sin embargo, insuficientes para compensar las fallas defensivas y en el montículo.
Esta derrota adquiere una dimensión estratégica aún mayor tras el reciente anuncio de la Comisión Nacional de Béisbol. Aunque Las Tunas ya aseguró su billete a la postemporada, los cambios reglamentarios para la Serie 64 convierten cada juego restante en una batalla crucial. La comisión determinó que solo se recuperarán los partidos pendientes que definan la clasificación a los dos primeros lugares de la fase regular. Quedar en esas posiciones otorga un pase directo a la Liga Élite.

