Las Tunas.- La cubanía brilló la noche de este martes durante la gala clausura de la Jornada Cucalambeana. Intérpretes de la localidad y de otras provincias unieron voluntades y talento para honrar a Juan Cristóbal Nápoles Fajardo (El Cucalambé), mayor poeta bucólico del siglo XIX cubano, en su cumpleaños 196.
La solista Viviana Ochoa abrió las presentaciones en el teatro Tunas, seguida por varios exponentes destacados de la empresa comercializadora de la música y los espectáculos Barbarito Diez, de Las Tunas, e intérpretes de diferentes zonas del país. Entre los coterráneos estaban José Fidel Sánchez, Lays Rodríguez y Camilo Hechavarría; entre los foráneos, María Victoria Rodríguez y José Antonio Iznaga (El Jilguerito).
Las locutoras Tahily Berrey y Nayde Ferrera condujeron la cita, arropadas por versos y palabras del corazón. Tonadas, punto cubano, bailes típicos del territorio…, esos y otros puntos de realce completaron los deleites de una propuesta arrulladora. Además, la Tulibamba, La sitiera y Los campos de Cuba figuraron en los temas del pentagrama autóctono que se compartieron.
Por su parte, la Danza Isleña de Pozas atrapó por su cadencia y lirismo en escena, mientras la Escuela de Trova de Colombia fue reconocida in situ por Darlenis Urquiola, directora provincial de Cultura. Seguidamente, esos versadores obsequiaron algunas estrofas que evidenciaron el cariño por nuestra tierra, a la que visitaron ahora por primera vez. También la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP) reconoció a la Flor de Birama elegida en este jolgorio.
Asimismo, los repentistas tuvieron su momento y, en las gargantas de Guillermo Castillo Vega, Juan Carlos García Guridi, Rainer Nodal y Sindy Manuel Torres, viajó la inspiración hacia figuras como Angelito Valiente, Jesús Orta Ruiz (Indio Naborí), Tomasita Quiala y el autor de Rumores del Hórmigo.
Sumaron brillo a la noche bailarines al estilo de Suiqué de la Rosa. Al cierre de la gala, entre aplausos y sonrisas del público, todos los creadores se unieron para cantar juntos a ese ajiaco que nos define y une, año tras año, en el Guateque Mayor.
Desde el 28 de junio, la Fiesta Suprema del Campesinado Cubano había tomado las riendas del acontecer cultural en la localidad, para enaltecer tan raigal espectro de la nacionalidad. Exposiciones, espacios teóricos, presentaciones artísticas… dieron vida a un programa en el que se unieron artistas aficionados y consagrados.