Las Tunas.- En épocas “normales”, alguna que otra vez compartimos minutos de conversación. Siempre se vislumbró afable y sonriente, pero nunca alcanzó el tiempo para conocer más sobre esa mujer con tanta experiencia que transmitir.
La ocasión se dio recientemente a través de la red social Facebook. Se trata de Dayalé Torres Diéguez, editora ejecutiva de la Revista Cubana de Transformación Digital de la Unión de Informáticos de Cuba (UIC) y especialista en la Vicepresidencia de Gestión del Conocimiento de la organización en el país.
Ella también trabaja como profesora a tiempo parcial en la Universidad de Las Tunas, donde imparte la asignatura de Historia Universal a la especialidad de Marxismo- Leninismo e Historia, y tiene una hija que cursa el sexto grado llamada Laura, que le inspira a superarse y enfrentar con optimismo cada jornada.
Hoy el teletrabajo abre las puertas a su desempeño y a través del Open Journal Systems (software de código abierto para la administración de revistas) edita la publicación científica y gestiona proyectos que hablan de su empeño por construir una sociedad mejor.
“La UIC tiene varios proyectos y hay uno del cual soy líder, cuyo objetivo es eliminar la brecha digital de género en comunidades de difícil acceso. Ese se llama Igualdad de géneros en la TIC sobre ruedas y es de alcance provincial, aunque la experiencia piloto tiene como sede a la comunidad de Blanca Rosa. Ese tópico es una de las prioridades de nuestro quehacer.
“Actualmente trabajamos en otro proyecto de mayor impacto, que incluye colaboración con la Unión Europea y tenemos la inmensa dicha de que Las Tunas sea uno de los municipios seleccionados. Se llama Laboratorios de Innovación para favorecer la transformación digital en el sector de la Cultura. Y, aunque estamos en fase de tramitación de documentos, ya está aprobado y eso es un logro.
“En este caso, tenemos vinculados a estudiantes de la Universidad. Uno de los aportes que se espera tenga esa iniciativa internacional será en función del turismo de ciudad y la tecnología de realidad virtual, que se evidencia, por ejemplo, en poner marcas (códigos QR) con toda la información histórica o cultural de los lugares o monumentos”, afirmó.
Ella es un ejemplo de madre trabajadora que, consciente de su papel en la sociedad aconseja “elevar la percepción de riesgo sin caer en el pánico. Hay que desinfectar todo lo que tocamos, me preocupa personas que toman el pan con las manos al comprarlo y sería muy saludable portar un pomo con solución de hipoclorito de sodio y antes de tocar esos alimentos desinfectarse las manos”.
Esas son las recomendaciones de Dayalé, quien hace de la cuarentena un espacio para la autosuperación y la educación de su hija en cuestiones importantes como el uso apropiado de las redes sociales por menores de edad. Mujeres como ella construyen el presente y aseguran el futuro, lo mismo con tareas domésticas, que consejos de madre o un montón de labores de diferentes sectores porque, como dijo ella: “El teletrabajo no significa trabajar menos”.