Ciego de Ávila.- Este sábado los Tigres de Ciego de Ávila se impusieron con un contundente nocaut beisbolero de 11 carreras por 1 en el abarrotado estadio José Ramón Cepero sobre unos Leñadores de Las Tunas que no pudieron descifrar al lanzador Ariel Zerquera.
El líder en victorias en la etapa regular con siete, hizo valer sus números y maniató a la cuadrilla, durante seis episodios, hasta que, quizás mantenido en demasía sobre el box, aceptó una anotación en el séptimo antes de abandonar el montículo. El zurdo espirituano apenas permitió tres sencillos en ese trayecto y liquidó a siete rivales por la vía del ponche para llevarse el triunfo ante un conjunto temido por su poder de ataque.
De otro lado, Robert Luis Delgado, que apenas pegó un incogible en 15 turnos al bate en la etapa semifinal, se metió este sábado en la piel de héroe con el madero en ristre y enloqueció a la fanaticada que desbordó los graderíos del Coloso de Vista Alegre.
El refuerzo guantanamero, de 4-4 en el juego, disparó en el segundo acto un cohete para traer a dos compañeros a casa y en el cuarto despachó un bambinazo con dos sacos ocupados para darle a sus felinos una ventaja inalcanzable. Luego, en el séptimo, ligó otro sencillo para completar siete impulsadas en la tarde.
También conectaron vuelacercas, con las almohadillas vacías, Ronaldo Castillo, Dennis Laza y el legendario Frederich Cepeda, que además pegó un doble para aumentar su liderato histórico.
La derrota cayó en los hombros de César García, quien se fue a la cueva después de lanzar tres apartados con seis anotaciones en sus récords.
LO POSITIVO
Si es que cabe, que esta derrota ocurra en el inicio cuando aún hay tiempo para reponerse.
LO PREOCUPANTE
Tal cual señalara más tarde en la conferencia de prensa el mánager tunero Abeicy Pantoja, de nuevo, los errores costaron carreras cuando una incomunicación entre Luis Vicente Mateo y Rondón derivó en par de carreras sucias para los Tigres en la segunda entrada. Aunque el partido no se perdió ahí, sino en el cajón de bateo, fue un lance desestabilizador en el inicio de partido.
El primer jit de Las Tunas llegó a la altura del sexto capítulo salido del bate de Luis Vicente Mateo, cuya oportunidad a la ofensiva, vale acotar, se facilitó por un error en tiro del paracortos avileño.
LO INTERESANTE
Desde las cinco que toleró Jesús Enrique Pérez en el sexto juego de las semifinales, es la segunda mayor cantidad de carreras que permite un abridor tunero en esta postemporada en la primera mitad de un juego.
El torpedero avileño cometió dos errores en una misma entrada, pero hoy era el día de Ciego. El muchacho se repuso en el siguiente lance y la grada lo premió con una ovación.
Este sábado Yordanis Samón se fue en blanco y ni se notó ante el despliegue ofensivo de sus compañeros.
Con Ciego de Ávila, los Leñadores no parecen tener términos medios: o les ganan o pierden por nocaut. De los ahora seis partidos en los que los Leñadores han salido noqueados en postemporadas de campeonatos, tres se los han propinado los Tigres, todos en el estadio José Ramón Cepero.
Es la primera vez que los Leñadores pierden en el arranque de un play off final en un torneo doméstico; incluso en el que en definitiva perdieron ante los Alazanes de Granma en la Serie Nacional 57, la cuadrilla, había ganado el primer juego.
