Las Tunas.- Por el peligro que representa para la población la presencia en el país del virus SARS-CoV-2, en la provincia de Las Tunas se adoptaron varias medidas para reorganizar la venta de productos agropecuarios y la primera de ellas fue suspender las ferias que acontecían los sábados en los municipios y los domingos en esta ciudad.
Por tanto, el último fin de semana de marzo, los días 28 y 29, iniciará esa pausa en una actividad que se realizó sistemáticamente por cerca de una década, a la que asistán miles de personas que adquirían carne, granos, viandas, frutas y hortalizas a precios módicos.
A partir de ahora, los productos se seguirán comercializando tanto en las placitas como en los mercados agropecuarios estatales (MAE) y en esas instalaciones habrá más control y mayores medidas de seguridad para la prevención del nuevo coronavirus, según informó el delegado del Ministerio de la Agricultura en el territorio, Omar Yoel Pérez López.
Precisó que en esta ciudad se mantendrá la gestión de venta de las diferentes empresas y que solo cambian los lugares de comercialización, pues se seleccionaron varias placitas y mercados en los que se concentrarán los envíos procedentes de los municipios de Jesús Menéndez, Puerto Padre, Jobabo, Majibacoa y Manatí, más lo que gestiona la Empresa de Acopio.
Dijo Pérez López, que en esta ciudad esos establecimientos son Leningrado, El Mambí, El Tunero, Los Almendros, y los MAE 13, 16 y 25, además de varias placitas y la de Becerra; y añadió que el resto de las unidades se vincularán con las formas productivas del municipio cabecera y especialmente con quienes cumplen sus planes de entregas.
Puntualizó que la Agricultura Urbana mantendrá 17 puntos y que la unidad empresarial de base Frutas Selectas tendrá participación un día de la semana, mientras que la Empresa Avícola venderá huevos y carnes dos veces en igual período.
Para satisfacer las demandas de alimentos agropecuarios, con la presencia en el país de la enfermedad Covid-19, los campesinos y trabajadores estatales del sector tienen un gran reto, lo que demandará de más organización y efectividad en la cosecha, trasportación y venta de esos productos.
Corresponde a la población comprar solo lo necesario para evitar el acaparamiento, hacer las colas disciplinadamente y demostrar respeto a las embarazadas, madres con niños pequeños, personas con discapacidad y los ancianos, pues solo con una conducta solidaria pueden llegar a más tuneros los productos agropecuarios.