Las Tunas.- En los últimos suspiros del noveno acto, un doble decisivo de Osvaldo Abreu, además de brindarle el triunfo a los Leñadores 8x7, cambió las mieles del hipotético décimo éxito en línea de los Cocodrilos por la amargura de la decena de reveses en la II Liga Élite y, de paso, devolvió a las filas locales la seguridad de la zona de clasificación.

Ante la emergencia del último episodio, el granmense arribó al cajón de bateo con la misión de conseguir un imparable que trajera desde la intermedia la carrera de la victoria. La pelota cayó en la pradera izquierda y Pica Pica, como le reconocen por su terruño, retomó sensaciones en el momento cero, luego de un torneo por debajo de las expectativas depositadas. 

Tal vez la única apuesta de Abeysi Pantoja que le proporcionara dividendos en la tarde, donde la ofensiva acusó una vez más de falta de productividad. Mueren en las almohadillas múltiples oportunidades a la espera de los batazos, en tanto, denota la falta de herramientas en el equipo para acercar a la “goma” a esos corredores. Males de hoy y de la campaña en general.

A diferencia de lo visto hasta el momento, el bullpen asumió responsabilidades y obtuvo mejor botín que el abridor de la jornada. Los desempeños de Keniel Ferraz, Yasel Labrada y el ganador Rodolfo Díaz significaron la primera piedra en la construcción de la remontada verdirroja. Los tres relevistas frenaron el empuje de los yumurinos, quienes fabricaron todas las anotaciones en los dos tercios iniciales del choque.

Aunque coleccionó ceros en la pizarra, Noervys Entenza flaqueó lo suficiente para añadir el descalabro a su hoja de servicios. 

Yosvani Alarcón (5-3/ 2B/ 4 CI) también contribuyó a la reacción tunera, sobre todo en el rally de cuatro “hachazos” en el sexto capítulo para empatar el desafío. Asimismo, Yunieski Larduet sumó otro par de remolques y exhibe siete impulsadas de las 15 carreras de la armada verdirroja en los tres duelos recientes. 

De vuelta a la balanza de 500, producto de 13 sonrisas y similar cantidad de desdichas, los representantes del Balcón de Oriente retoman su estadía en la zona de clasificación, distanciados a tres juegos de los punteros matanceros (16-10). En tanto, el abrazo entre ambas novenas en el cruce particular promete una avalancha de emociones hasta el domingo.