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Moscú.- El portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, subrayó que su país no utiliza misiles Tochka-U como el lanzado hoy contra la estación de trenes de la ciudad de Kramatorsk, en la autoproclamada República Popular de Donetsk (RPD).

El alto funcionario instó a los medios de comunicación a seguir las declaraciones del Ministerio de Defensa de Rusia, que excluye la utilización de este tipo de misil por parte de sus Fuerzas Armadas y que advierte sobre su uso por las tropas ucranianas.

"Nuestras Fuerzas Armadas no utilizan este tipo de misiles. Además, no hubo misiones de combate en Kramatorsk y no estaban previstas para hoy", puntualizó Peskov.

Por su parte, la cartera de Defensa rusa calificó de "provocación y absolutamente falsas" las declaraciones de Kiev culpando a Moscú sobre el ataque contra la estación de tren de Kramatorsk.

Detalló que los misiles tácticos Tochka-U, cuyos restos fueron encontrados cerca del lugar del impacto, y publicados por los testigos, están siendo utilizados por las Fuerzas Armadas ucranianas.

Recordó que el pasado 14 de marzo, otro misil igual de las fuerzas ucranianas cayó en el centro de la ciudad de Donetsk, matando a 17 personas en el acto e hiriendo a otras 36.

Según el jefe adjunto de las fuerzas de la RPD, Eduard Basurin, unas 30 personas murieron este viernes a causa del impacto del cohete en la estación de trenes de Kramatorsk.

"Primero se anunció la evacuación de estas ciudades: Kramatorsk, Konstantínovka, Artiómovsk, Slaviansk. La gente comenzó a reunirse en lugares donde se puede salir rápidamente; es decir, la estación de trenes. Cayó un proyectil. Hay cerca 30 muertos", indicó a la cadena de televisión rusa Canal 1.

Según Basurin, las autoridades ucranianas no ocultaron que estaban preparando nuevas provocaciones. Narró que desde Kiev, inmediatamente, comenzaron a decir que el misil fue lanzado por Rusia.

"Pero los medios que tiene la gente, me refiero a los teléfonos, las cámaras, grabaron que había restos de un Tochka-U", explicó el funcionario de la RPD.

Aseguró que el misil táctico Tochka-U "no está en servicio en nuestras repúblicas, me refiero a Donetsk y Lugansk, y el Ejército de la Federación de Rusia tampoco lo tiene".

Para el jefe de la RPD, Denís Pushilin, el acto constituye "otra monstruosa provocación, otro crimen de guerra del régimen de Kiev. Para nosotros todo está claro, el régimen de Kiev no considera a esta gente como propia, no se detiene ante nada", expresó a la televisora Rusia 1.

El funcionario alertó que este bombardeo no será la última provocación de las Fuerzas Armadas de Ucrania, por lo que llamó a la población "a prepararse y contrarrestar estos crímenes de guerra, si es posible".

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