Las Tunas.- La amistad entre Finlandia y esta provincia del oriente cubano es a prueba del tiempo. Así lo demuestra la estancia aquí esta semana de 12 integrantes de la Asociación de Amistad de esa nación nórdica, cuya brigada de trabajo voluntario, Victoria de Girón, está celebrando este año su aniversario 15.
Los activistas europeos laborarán durante tres días en la sala de Oncohematología del hospital pediátrico Mártires de Las Tunas, en la concreción de otro capítulo de una larga saga de contribuciones directas, tanto en lo material como en lo financiero, para la mejoría de varias áreas de la instalación hospitalaria. En esta ocasión, toman parte en las acciones constructivas que renovarán el mobiliario y los sistemas de climatización de una de las zonas más sensibles de la mencionada instalación.
El aporte desinteresado de la asociación finlandesa es particularmente importante ahora, dijo la doctora María Cristina Cisneros Vázquez, directora del “Mártires de Las Tunas”, pues, explicó, el recrudecimiento del bloqueo económico estadounidense los ha impactado muy duro en los últimos años, provocando carencias de equipos para diagnósticos, así como el déficit de insumos que les impide reducir y eventualmente eliminar la lista de espera quirúrgica que ahora mismo supera los 600 pacientes.
“Podemos ayudar”, expresó, tras escuchar los esfuerzos del hospital para sortear las dificultades, Anna Haavisto, brigadista que llegó por primera vez a Las Tunas. Mientras que su compatriota el joven Veeti Vantola subrayó el valor de esta iniciativa para conocer directamente la realidad cubana.
Como es tradicional, a instancia de la Delegación del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP), la agenda en suelo tunero incluye intercambios con representantes de diferentes sectores económicos, sociales y culturales en el Balcón de Oriente. Sin olvidar su periplo por Omaja, poblado del municipio de Majibacoa en el que finlandeses fundaron una colonia agrícola a inicios del siglo XX.
