Las Tunas.- En la tarde de este 23 de marzo llegó a su fin la 32 Feria del Libro y la Literatura en Las Tunas, evento que abarcó aquí un amplio programa literario, así como la venta de alrededor de 180 títulos y 11 mil ejemplares.
Reunidos en el parque Maceo del centro histórico tunero, directivos, escritores y creadores diversos dijeron adiós a la actual edición, dedicada -en su capítulo provincial- al escritor Carlos Tamayo y a la editora Mirtha Beatón.
Las solistas Berlis Fernández y Dalia Macayo, la actriz Elizabeth Borrero y otros artistas amenizaron el acto de clausura. También fue momento idóneo para dar a conocer el ganador del Concurso Nacional Principito 2023, que resultó el tunero Aleido Rodríguez Cabrera, con el poemario infantil Lecciones de agua. No faltó el homenaje a Tamayo y Beatón, como sucedió en el transcurso del evento a través de varias iniciativas.
“Fue bello estar aquí. Se apreció un ambiente bueno, con un programa interesante y ese movimiento literario que siempre ha caracterizado al territorio. El Centro Provincial del Libro y la Literatura hizo un esfuerzo tremendo por traer a escritores de otros lugares, así como presentaciones de libros, paneles, lecturas… El libro estuvo vivo, está presente”, expresó a 26 Alberto Marrero Fernández, presidente de la Asociación de Escritores de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (Uneac) en el país y uno de los participantes en la cita.
El destacado escritor e investigador Rafael de Águila añadió: “Todo esto también es resultado de la política cultural de la Revolución Cubana, de la existencia de editoriales y talleres literarios en cada provincia, de escritores que durante más de dos décadas ha capacitado el Centro de Formación Literaria Onelio Jorge Cardoso… En Las Tunas hay una cantidad apreciable de autores jóvenes de mucha calidad, destacando también creadoras del sexo femenino”.
Como ellos, otras prestigiosas figuras de diversos territorios del país nos acompañaron por estos días. En la lista figuraron nombres como Nelton Pérez, Carlos Ettiel, Ariel Fonseca, Francisco Rodríguez Cruz (Paquito el de Cuba) y Jorge Luis Mederos (Veleta), quienes se insertaron en diferentes actividades, desde paneles hasta presentaciones de libros y lecturas de textos.
En general, un programa literario variado y con calidad matizó la Feria. El espacio infantil Tesoro de Papel se ratificó como el de mayor presencia de público, con actuaciones dos veces al día de colectivos escénicos del territorio y otros aderezos. Asimismo, otros como Ciudad Virtual, Flores del Alma, la Peña de la Luz, Versiones de Nefelibata, Sinestesia, e Historia y Memoria propiciaron el deleite a través de múltiples iniciativas. Y Traigo tu Lluvia, con carácter extensionista, llegó hasta la tabaquería Enrique Casals y varias escuelas. Por su parte, las ventas, al decir de Maike Machado, director del Centro Provincial del Libro y la Literatura, demostraron que todavía existen personas aquí que disfrutan el placer de la lectura.
También destacó dentro del evento el debut de nuevos libros por parte de la editorial Sanlope, tanto en formato impreso como digital, y de publicaciones al estilo de la revista Quehacer número 6. Además, fue plausible la socialización del plegable promocional Solo de poesía, que impulsa el Proyecto Cultura y Tuneridad, y la divulgación en nuestra tierra de La guagua de Babel, con el que Carlos Esquivel, escritor local, mereciera el Premio de Poesía Nicolás Guillén, entre muchas otras presentaciones, más de 60 en total.
Así, cerró sus capítulos el evento, con la satisfacción de haber propiciado -en medio de las circunstancias adversas por las que atraviesa el país- el placer de la lectura, el deleite del aprendizaje y esa confluencia hermosa entre creadores.
