Las Tunas.- La edición número 25 de la Copa Nacional de Paracaidismo Deportivo 13 de Agosto, en la modalidad de precisión de aterrizaje, cerró sus cortinas en el municipio guantanamero de Baracoa.
Hacia esa norteña localidad se trasladó el equipo de Las Tunas, integrado por Miguel Martínez, Iván Pérez, Giovannis Rojas, Fioder Rojas y Miguel Rojas, con la ilusión de realizar la mejor actuación en esta competición que se organiza cada año en saludo al natalicio de Fidel Castro Ruz y a la fundación de la Ciudad Primada. También los acompañó Rigoberto Fonseca, uno de los jueces de mayor experiencia en estas lides y que goza del prestigio de los practicantes de tan arriesgado deporte en el país, quienes lo consideran de los más imparciales.
En el evento se dieron cita más de medio centenar de paracaidistas de varias provincias distribuidos en nueve equipos, uno de ellos femenino, y como novedad del certamen por primera vez un municipio, la sede, participó con equipo completo.
Fueron varias jornadas competitivas en las que la población disfrutó de escalofriantes caídas libres desde el avión a más de mil metros de altura y del trabajo en el aire; así como de los aterrizajes que buscaban marcar en el blanco en una plaza de saltos que se antoja bien difícil, pues la zona de aterrizaje está a escasos metros del mar, lo que requiere de máxima concentración y habilidades de los participantes.
LAS RONDAS COMPETITIVAS
De antemano se sabía que la competencia iba a ser bien reñida, teniendo en cuenta que acudieron a esta edición parte de los mejores practicantes de este deporte en la Isla. Nuestros representantes se hicieron sentir desde el mismo primer salto al ubicarse en el cuarto lugar en la tabla general, lo que puso a soñar a todos los tuneros amantes de este deporte.
Se mantuvieron en ese escaño hasta la jornada final. Llegó la ronda decisiva; querían hacer historia. Pero no siempre sucede lo que queremos; los equipos que ocupaban los tres primeros peldaños en la tabla no cedieron espacio y los nuestros, a pesar de conseguir excelentes marcas, se quedaron a solo 0,05 centímetros (cm) de su más cercano antecesor y de acreditarse la medalla de bronce.
Las puntuaciones obtenidas en el último salto por los de la tierra del León de Santa Rita sumaron en total de 0,27 cm por 0,25 de los guantanameros, que a la postre se adueñaron del metal bronceado. Para dar la puntuación, los jueces actuantes desechan la peor marca de la ronda por cada equipo y suman las restantes cuatro; mientras menos centímetros, mejores son los resultados colectivos e individuales.
LAS PALMAS PARA MIGUEL
El Club de Paracaidismo de Las Tunas cuenta con deportistas consagrados que son los principales protagonistas de que nuestro cielo en ocasiones deje de ser azul y se pinte de una alta gama de colores. Uno de ellos es Miguel Antonio Martínez Cartón, un hombre hecho para esta disciplina y que a pesar de sus 65 años de edad continúa mostrándonos de qué material está hecho.
Este excepcional paracaidista obtuvo la medalla de plata en lo individual en una competencia que necesitó un salto extra para definir el segundo y tercer lugar. Fue entonces cuando Martínez Cartón puso en práctica toda su experiencia para marcar 0,01 cm del blanco que dejó a sus contrincantes prácticamente sin aliento.
En sentido general, fueron jornadas muy exigentes por el ardiente sol y la tensión propia de una competición que reservó sus mejores emociones para la jornada final. Ahora toca hacer los análisis pertinentes de los errores que pudieron cometerse en un deporte en el que deben primar la disciplina y el respeto en el tráfico aéreo para evitar situaciones de riesgo, peligro o accidente.
Este redactor, que presenció la competencia de inicio a fin, se queda con la vergüenza deportiva mostrada por los nuestros, con la confianza ganada en cada ronda de saltos y con la mejora paulatina; todo lo cual demostró que son competitivos. Saborearon el podio, hicieron hasta lo impensable porque sabían que de lograrlo significaba el mejor resultado en la historia de un equipo tunero en este evento; lucharon, se batieron, trataron, pero no pudieron.
