Beijing, China.- Con el arribo de los periodistas al Centro de Prensa, el XX Congreso del Partido Comunista (PCCH) de esta nación asiática "calienta sus motores" a pocas horas de la apertura de su sesión plenaria programada para este 16 de octubre en el Gran Palacio del Pueblo de esta capital.
En los hoteles Beijing Media Center y Nikko New Century Beijing y bajo estrictas medidas de control anticovid-19 comenzó a operar este viernes, hora local, el centro de medios de comunicación habilitado por los organizadores para el referido evento. Aproximadamente dos mil 500 profesionales de la información, de los cuales 150 provienen de Hong Kong, Macao y Taiwán; y 750 del extranjero, se acreditaron para dar cobertura al suceso político más importante del año aquí.
Toda la atención se centra en el momento inaugural del XX Congreso fijado para este domingo, que marcará el inicio de la magna cita de los comunistas chinos que se prolongará por una semana. El Congreso es la máxima autoridad del partido gobernante en esta nación asiática y se celebra cada cinco años. Durante el mismo los más de dos mil delegados elegirán un nuevo Comité Central, quienes a su vez seleccionarán a los miembros del Buró Político y a los integrantes de su Comité Permanente de este último, así como al secretario general. Analistas dentro y fuera de China coinciden en que Xi Jinping será reelecto para un nuevo mandato de un lustro al frente del Partido, avalado por su liderazgo hacia lo interno y sustentado en el progreso casi ininterrumpido de China en la arena nacional e internacional desde que asumió dicha responsabilidad en el 2012.
Sin embargo, la opinión pública mira con atención a quienes serán los electos para el Comité Permanente de Buró, pues ahí están representadas otras estructuras claves dentro del sistema político-gubernamental del país, además del propio Comité Central del PCCH, como lo son la Asamblea Popular Nacional, el Consejo de Estado, la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino; así como las comisiones Militar Central y la Central de Control Disciplinario.
Este XX Congreso trazará las pautas que guiarán a esta nación emergente en materia económica y política en los años venideros. En este sentido, los analistas creen que se mantendrá la línea trazada en el cónclave del 2012 que, si bien preservó la prioridad de la construcción del socialismo bajo características chinas, también hizo hincapié en la urgencia de corregir las desigualdades sociales y regionales resultantes del despegue económico ocurrido con la Reforma y Apertura emprendida por China a partir de 1978.
Consecuentemente ha sido palpable en el último quinquenio, en el plano doméstico, la apuesta de las autoridades chinas por la revitalización de las comunidades rurales, la lucha contra la pobreza extrema, la protección del medio ambiente, la modernización de las fuerzas armadas; y la determinación por robustecer la política de Un país dos sistemas en la región administrativa de Hong Kong, especialmente la defensa de la soberanía nacional sobre la provincia china de Taiwán. Mientras que en materia de las relaciones internaciones han sido consistentes en su propuesta de alternativas de desarrollo mutuo para el Tercer Mundo, mediante su iniciativa de la Franja y la Ruta y en hacer de China un factor de equilibrio dentro del tableo geopolítico global.
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Previo a la realización de esta sesión plenaria, el Comité Central del PCCH realizó esta semana su séptima sesión plenaria, en la cual aprobó el informe central que se presentará en el XX Congreso, junto a textos que pasaron revista a la labor realizada por la Comisión Central de Control Disciplinario. Reportes de prensa anticiparon, además, que se presentarán enmiendas a los estatutos del PCCH.
