Las Tunas.- En noviembre del 2019 fue aprobado el Programa Nacional contra el Racismo y la Discriminación Racial en Cuba. La iniciativa, que se va implementando en todos los territorios del país, parte de una minuciosa indagatoria de cada terruño sobre este particular y apuesta por identificar y combatir las causas que propician su permanencia en nuestra realidad.
Entre los muchos empeñados y agradecidos porque el trabajo se vaya abriendo paso está la joven doctora en Ciencias Yudenia Arias Domínguez, profesora de la Universidad de Las Tunas (ULT). Ella asegura sentirse agradecida de que el país esté retomando con mucha fuerza el debate sobre la racialidad.
“Estamos reabriendo un tema que nunca debió cerrarse y es una gran fortaleza que contemos con un programa nacional; ahora, lo que no podemos es permitir que se quede solo en eso.
“Se hace indispensable que la sociedad sea conocedora de las raíces históricas que tiene la problemática porque, de lo contrario, no estaríamos verdaderamente trabajando en función de acabar con los rezagos que tiene el racismo en Cuba.
“Un fenómeno que se manifiesta en prejuicios, estereotipos y discriminación, no solo por el color de la piel, aunque sabemos que ese aspecto tiene muchísimo acento en las personas; y no hay blancos en Cuba, esa es una realidad”.
Toca a los expertos volverse un poco facilitadores de todo el trabajo; y eso, que no es nada sencillo, parte de una verdad tan evidente como profunda: no existe disposición que, por sí misma, pueda acabar con las inequidades sociales.
“Cuando, en el año 1962, el Comandante en Jefe dijo que este era un tema cerrado todo el mundo lo asumió como eso y, posteriormente, todos sabemos que el propio Fidel dio tratamiento al asunto. Los documentos históricos recogen en cada uno de sus discursos que sí, siempre ha sido un tema que ha estado en la agenda de gobierno de nuestro país”.
A la experta le parece muy bueno que se trabajen estos asuntos también desde la enseñanza de la historia porque 500 años de colonialismo no pueden borrarse muy fácil de la mente del cubano.
“Los estudios recientes han demostrado que Cuba es una sociedad mestiza no solo culturalmente, y yo creo que tenemos una deuda con eso.
“Este es un Programa que incluye aristas en las que se habla, por ejemplo, del rescate de la memoria histórica, una deuda que tenemos con la necesidad de preservar la historia del pueblo”.
La doctora Yudenia considera que es un tema en el que hay que seguir escudriñando y dice que ahora es el momento de hacer para que se concreten cambios reales en nuestra sociedad.
“No podemos seguir dejando al azar esa herencia. Hoy, en la periferia de la ciudad, las poblaciones son generalmente negras y las condiciones en las que viven no son las mejores; entonces ese es el camino que nos toca, ayudar a revertir todo eso. Creo que estamos en condiciones de asumir el reto; aquí estamos”.
