Las Tunas.- Tras un proceso dilatado, marcado por retrasos en la culminación de las inversiones, el lapso terrible de la covid-19 y también el desconocimiento tecnológico, ya está calibrado y comprobado el sistema de la planta desalinizadora ubicada en el barrio El 12 del municipio de Jobabo.
Así lo dio a conocer la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Las Tunas en su perfil de Facebook; y, a través del director de ingeniería, Juan Carlos Iznaga, 26 obtuvo otros detalles.
"La planta está diseñada para procesar tres metros cúbicos de agua por hora; y se decidió que su instalación fuera ahí, en ese pozo del 12, porque es una de las fuentes de abasto de mayor salinidad en toda la provincia.
"La intención es establecer dos puntos de venta de esa agua. Uno de ellos en la propia planta y el otro en la zona de La Punta, en la cabecera municipal de Jobabo.
"Por supuesto que, aparejado a esto, se mantendrá el sistema de bombeo tradicional establecido hasta ahora para todo el municipio".
El directivo destacó el trabajo de la joven Empresa de Plantas de Tratamiento de Agua Acuanova S.A., radicada en La Habana, que asumió la instalación de esta moderna planta, marcada por un sistema digital y completamente automático.
Toca ahora definir la fecha de puesta en marcha y, antes de eso, establecer las fichas de costos y otros detalles que ojalá no demoren demasiado. Ya ha sido enorme la dilación de alrededor de cuatro años desde que concluyeran los trabajos de la obra civil.
Un tiempo que invita, incluso antes de la arrancada, a dar una mano de pintura y hasta mantenimiento a algunos equipos.
