Las Tunas.- Como un regalo adelantado de la naturaleza han llegado los aguaceros de las últimas jornadas en los municipios de Las Tunas, pues es muy tensa la situación de los 23 embalses administrados por el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (INRH) de esta provincia.
Alexey Moreno Borges, subdirector técnico del Centro Meteorológico, explicó que las lluvias recientes están asociadas a una vaguada con lento movimiento sobre la región oriental y a otras condiciones favorables en el área geográfica.
Pronostica el especialista que durante el fin de semana disminuirán las probabilidades, aunque para el lunes se anuncia la ocurrencia de precipitaciones intensas. Ya en mayo inicia el período húmedo y pueden suceder con más frecuencia.
Según el parte diario de la Delegación local del INRH, en lo que ha transcurrido del mes se acumulan 82,6 milímetros de un promedio histórico de 58,9 para un 140 por ciento y la caída de estas han sido más significativas en las zonas del centro y sur de la provincia.
Sin embargo, la situación de los reservorios de agua es preocupante apenas tienen poco más de 100 millones de metros cúbicos, o sea, el 29 por ciento de sus potencialidades.
Por municipios, las mayores inquietudes están en Jobabo, Puerto Padre y Jesús Menéndez, con 5, 12 y 13 por ciento, respectivamente. Les siguen Colombia (31), Las Tunas (32), Majibacoa (35) y Manatí (55). Solo Amancio, al 80 por ciento, posee una buena cobertura.
Ante estas circunstancias son más que bienvenidas en el territorio tunero, donde también se favorecen los programas agrícolas y ganaderos, porque permiten la siembra oportuna de variados renglones, el reverdecimiento de los pastos y forrajes en áreas cultivadas y potreros.
No obstante -de manera especial en ciudades y poblados- se impone la limpieza de alcantarillas, zanjas y canales para que el agua fluya con facilidad y se eviten acumulaciones del líquido en zonas bajas, con los consiguientes perjuicios materiales y psicológicos a los vecinos de los lugares vulnerables.
