Las Tunas.- Los municipios de Puerto Padre y Majibacoa tienen declarada transmisión de dengue; y los estudios para vigilancia realizados a las muestras enviadas a los laboratorios del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK) confirman que en el territorio, ahora mismo, circulan, además, los virus respiratorios de la influenza A H1N1, el coronavirus HKU1, el enterovirus, el sincitial respiratorio y la covid-19.
Lo reitera la doctora Yumara Acosta García, directora del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología (CPHEM), y abunda en que las enfermedades respiratorias en este período manifiestan un aumento de las atenciones médicas y representan un 7,2 por ciento de incremento del riesgo de enfermar en relación con igual período del año anterior.
La especialista advierte que se ha confirmado el Oropouche en los municipios de Puerto Padre, Menéndez, Jobabo y Colombia; y, aunque la asistencia médica por padecimientos diarreicos agudos en las últimas semanas ha disminuido, el canal endémico se encuentra en zona de alarma y los municipios de Majibacoa, Colombia y Amancio en zona de epidemias.
Por esas razones califica de compleja la situación epidemiológica local y enfatiza en la necesidad de combinar eficientemente las medidas técnicas que asume el sector con el apoyo popular, fórmula inequívoca para garantizar la transformación en favor de la salud colectiva ahora amenazada por los males citados.
Alcanzar efectividad en la respuesta en estos momentos de limitaciones de recursos para desplegar grandes campañas exige a la población acudir a los consultorios y cuerpos de guardia ante cualquier síntoma, pues de esa manera son posibles diagnóstico y tratamiento oportunos, y dirigir las acciones hacia las zonas más comprometidas, según la cantidad de casos detectados por patología, propone la doctora.
Remarca que esa práctica la ejecutan como parte de una estrategia que incluye otras acciones técnicas para prevenir la proliferación de esas enfermedades, entre las que destacan el reforzamiento del trabajo en las manzanas con febriles y sospechosos de dengue, clasificadas como de alto riesgo entomoepidemiológico, en transmisión y reiterativas; y, la búsqueda activa de casos sospechosos de arbovirosis para diagnóstico y tratamiento.
Asegura que evalúan en los grupos temporales de cada municipio dónde realizar saneamiento ambiental en viviendas y manzanas estratificadas a partir de la existencia de estados febriles; y, procuran el bloqueo de casos al 100 por ciento de los susceptibles de arbovirosis en las primeras 24 horas y dar un pase de tratamiento adulticida a las manzanas con esas tendencias.
Porque lo ha demostrado la práctica, Acosta García considera imprescindible sumar a las comunidades y a los colectivos laborales a estas tareas de manera consciente y sistemática para proteger la salud y la vida de la población en medio, enfatiza, de la compleja situación epidemiológica que vive la provincia y la escasez de insumos.
La directora del CPHEM insiste en la convocatoria al pueblo de aumentar la percepción de riesgo y evitar acudir a las instituciones médicas después de varios días de evolución porque puede comprometer la vida de los pacientes.
En ese mismo sentido indica no automedicarse, la realización en casa del autofocal familiar, la limpieza de patios y zanjas, el cepillado de tanques y bebederos de animales; lavarse las manos frecuentemente; hervir el agua. Usar mosquitero, nasobuco si hay síntomas respiratorios y, en lugares de conglomeración de personas; emplear hipoclorito, y no acudir a los centros laborales o educacionales con signos y síntomas de estas patologías.