Las Tunas.- En un principio fue la curiosidad la que lo hizo extender su brazo para donar sangre. Confiesa que no olvidará esa primera vez, con el sudor inundando su cuerpo y la sensación de estar a punto de desmayarse. Por suerte aquello no pasó del susto, y en ese “arranque” juvenil descubrió la esencia del gesto que lo ha llevado a mantenerse en el Programa de Donaciones por más de 10 años. Su nombre: Yolier Rojas Palmo.
No sabe cuántas vidas ha ayudado a salvar, pero sí que han sido muchas, y lo dice con orgullo. “Si las personas sintieran el dolor ajeno no pensaran tanto a la hora de hacerlo. A mí me gusta donar para ayudar a los demás, y eso me hace feliz”.
Cuenta que en una oportunidad su madre necesitó sangre y en esos duros momentos le crecieron las certezas, esas que lo impulsan a ofrecer esperanzas en cada gota, por la sola recompensa de sentirse útil.
Rojas Palma es uno de los tantos tuneros que practican, desde el anonimato, este acto altruista. Tan solo en el actual año, y pese a la pandemia, aquí sobrepasan las 13 mil 100 donaciones voluntarias, de un propósito anual de 16 mil. Más que números es una muestra de compromiso y amor a los semejantes.
UN ACTO SALVADOR
Las donaciones de sangre resultan vitales para la fabricación de albúmina, gammaglobulinas y el Factor de Transferencia, utilizado en el protocolo de tratamiento a los enfermos de la Covid-19, y el Anti-D, destinado a las embarazadas RH negativo, para evitar la enfermedad hemolítica del recién nacido.
La doctora Yoaska Boffill Borroto, vicedirectora del banco provincial de sangre 28 de Septiembre, explica que este año enviaron al Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología más de dos mil 800 unidades de concentrados leucocitarios, usado en la elaboración del herbertrans, factor de transferencia que fortalece el sistema inmunológico humano, principalmente, de los adultos mayores y los infantes.
Asimismo, el territorio entrega plasma hiperinmune de pacientes recuperados de la Covid-19 a la Planta de Hemoderivados, donde fabrican productos como la gammaglobulina enriquecida con anticuerpos anti-SARS-CoV-2, que refuerza el sistema inmune y contribuye en el tratamiento a pacientes graves y críticos.
No menos importante resulta la cooperación con un proyecto liderado por un equipo del hospital Ernesto Guevara, que aprovecha el plasma rico en plaquetas en los servicios de Ortopedia, Dermatología, Oftalmología y en Cirugía Plástica para la bioestimulación facial. Este año se han beneficiado más de 200 pacientes, refirió Boffill Borroto.
Hasta la fecha, la mayoría de los municipios cumplen los planes, excepto Manatí, Puerto Padre y “Jesús Menéndez”, que no han podido llegar al propósito debido a la situación epidemiológica y al proceso de la vacunación masiva. No obstante, de manera general, los resultados han sido satisfactorios y así lo avala la Condición de Destacado a nivel nacional en el movimiento de donantes voluntarios de sangre que recibieron los Comités de Defensa de la Revolución (CDR).
Desde el Banco Provincial de Sangre, los especialistas exhortan a donar después de superar la Covid-19, para lo cual pueden acudir a los bancos de los municipios de Puerto Padre, Amancio, Jobabo y Las Tunas, o participar en los bancos móviles que se realizan en Majibacoa, Manatí y "Colombia". Mientras, el grupo de avanzada, ese que hace posible la realización de varios de los procederes asistenciales, continúa extendiendo el brazo a favor de la vida.
