Las Tunas.- Un estudio de la Universidad de esta provincia del oriente cubano identificó las necesidades de superación de los jóvenes residentes en dos barrios vulnerables y que en estos momentos están desvinculados del estudio o el trabajo.
El sondeo abarcó a 152 jóvenes de las comunidades Petrocasas y México, ambas en la ciudad de Las Tunas, identificadas como endebles por sus altos niveles de desempleo, deserción escolar y otros problemas sociales allí existentes. De acuerdo con la investigación, la mayoría de esos habitantes menores de 40 años sin nexos con institución educacional o laboral alguna solo completó el Preuniversitario o la Enseñanza Secundaria.
Los encuestados manifestaron su interés por reincorporarse a los estudios de Bachillerato o superiores; al tiempo que señalaron a las carreras de Cultura Física, Turismo, Contabilidad, Educación, Lenguas Extranjeras y Economía como las más atractivas para ellos. "Muchos quieren continuar estudiando, terminar su grado 12 y seguir adelante", relató Luis Alejandro Aguilera Lora, uno de los docentes que concretaron sobre el terreno esta estrategia. El también profesor de la Facultad de Cultura Física catalogó de crucial el rol de la Universidad en esos entornos, no solo identificando las dificultades sociales existentes, sino, insistió, siendo parte de la solución.
La indagación es parte de la estrategia de atención en comunidades vulnerables de la Universidad de Las Tunas, explicó la vicerrectora primera de la institución, doctora en Ciencias Yoenia V. Barbán Sarduy. En la misma, dijo, participó más de una decena de estudiantes y profesores, quienes por varias semanas recorrieron las comunidades e interactuaron con sus pobladores.
"Nuestra presencia, insistió Barbán Sarduy, se hizo bajo la premisa de distanciarnos de la espontaneidad y la improvisación; adaptándonos a las necesidades e intereses de la propia comunidad, sustentados en la unidad de los actores y miembros del Grupo de Trabajo Comunitario; y teniendo presente que los integrantes de ese vecindario son los protagonistas de su propia transformación individual y social".
La pesquisa hizo notar que al menos cinco tesis doctorales, una de maestría y tres de pregrado completadas en la Universidad de Las Tunas tuvieron temas relacionados con las dinámicas comunitarias, las cuales serían relevantes para comprender las que ahora están siendo objeto de acciones de renovación. Dichos trabajos han abordado asuntos como la marginalidad, la cultura de la paz, la diversidad y perspectiva de género, la disciplina social, la prevención de la violencia en el marco infantil, la violencia de género, la racialidad y la familia.
Los resultados del estudio fueron presentados ante los delegados de circunscripción de las dos áreas estudiadas, así como frente a representativos del Partido, la Asamblea Municipal del Poder Popular del territorio cabecera y directivos de instituciones facilitadoras de los requerimientos manifestados por los jóvenes. Tras escucharlos, Marbelis Mir Corrales, miembro del Buró Ejecutivo del Comité Provincial del Partido, opinó que "estrategias como esta rompen con el enfoque asistencialista y van hacia el establecimiento de vías autogestionables de crecimiento personal para estos jóvenes". Por su parte, Nílser Piñeda Cruz, director provincial de Educación, lo calificó como muy útil; y, acotó, "implica el compromiso de trabajar para darles las oportunidades de empleo y superación".
A partir de enero del 2022, la estrategia de atención en comunidades vulnerables de la Universidad de Las Tunas, anunció la vicerrectora primera, pasará a la fase de ejecución mediante la realización de cursos y talleres de capacitación en ambos sitios. Además, explorará las opciones de continuidad de estudios para los jóvenes que tomaron parte en la primera fase del estudio. Para lograrlo, recalcó, será imprescindible la integración de instituciones como las direcciones provinciales y municipales de Deportes, Cultura y Educación, así como la Federación de Mujeres Cubanas y la Unión de Informáticos de Cuba.
La semana pasada, precisamente desde las calles del "México", el primer secretario del Comité Central del Partido y presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, hizo hincapié en que no se trata de intervenir en esos barrios, sino de escuchar primero a los residentes y a partir de ahí trabajar en la mejora continua de sus condiciones de vida, no solo desde el punto de vista material , sino también espiritual.
