Las Tunas.- Incentivar el uso de la guayabera en todo el Archipiélago es uno de los objetivos que persigue el diseñador Jordi Leal con su proyecto, de ahí la idea de recorrer Cuba con una muestra de sus prendas más especiales para ser exhibidas por modelos locales.
Una amplia campaña de promoción acompañó su estancia aquí, con la explicación oportuna del empeño que lo inspira hace 10 años y que cuenta con el apoyo de creadores, intelectuales y varias personalidades distinguidas que han tenido a bien usar sus modificaciones del vestuario nacional.
"El proyecto Guayaberas surge dentro del JLeal en enero del 2013, y ni siquiera comenzamos diseñando estas piezas, pero cuando sacamos la primera colección femenina aquello superó todas nuestras expectativas y dijimos: este es el camino", explica el joven, que también incursiona en el modelaje.
Iliana Mulet, Alicia Leal, Flora Fong, Nelson Domínguez, Milton Bernal, Cecilio Avilés, Máikel Herrera y muchos más han colaborado ilustrándolas, con motivos que identifican su obra y respetando elementos que caracterizan la vestimenta.
Roberto Chile, Julio Larramendi y otros fotógrafos han captado a los profesionales que las han llevado, instantáneas destinadas a la exposición Son de Cuba, el mismo nombre del libro que se escribe con la colaboración de Ciro Bianchi y otros. Esas páginas recogen la historia, curiosidades y aspectos interesantes alrededor de esta iniciativa y quienes se han vinculado, impulsados por el persistente emprendedor.
Hasta varias provincias trae ahora alrededor de 10 ejemplares de sus diseños para despertar el interés del público desde la visualidad de las innovaciones que ha incluido, siempre con el afán de ponderar la guayabera, insiste. A lo que se ligan sus propósitos de extender tal esfuerzo con ramificaciones a modo de réplicas de la casa-museo de nuevo tipo que debe inaugurarse en la capital en los próximos meses.
"Vamos a crear subsedes en diferentes territorios, no hará falta llegar hasta La Habana para adquirirla. Por eso estamos firmando contratos con Caracol, el Fondo Cubano de Bienes Culturales y otros organismos, así la puedan llevar y defender como se merece.
"Asimismo, nos ha servido el recorrido para incorporar a otras figuras de las artes plásticas y manifestaciones, aquí en Las Tunas, igualmente, valoramos lo más distintivo para enriquecer el concepto, algo que se nos dificulta por estar enclavados en la capital".
En conversación con directivos de Cultura Provincial pudo concretar la intención de regresar con un intercambio más directo que aporte al evento cumbre de Las Tunas, la Jornada Cucalambeana.
La idea es que las Flores de Birama porten sus creaciones durante el convite, que es precisamente expresión auténtica de tradición, de esos campesinos que se mantienen defendiendo ese vestuario como representación genuina de su procedencia.
Igualmente, sueña un espectáculo desde y con los artistas tuneros para exaltar la guayabera, aportar en la preparación de un grupo de maniquíes y traer hasta aquí en la ocasión la exposición Son de Cuba.
En lo macro, el proyecto de Jordi Leal tiene propuestas para niños y están pensando en hacer para embarazadas, acometer el reto de vestir al Ballet Nacional de Cuba con ajustes que posibiliten los movimientos clásicos de los bailarines y, en el aspecto económico, lograr un equilibrio calidad-precio para ofertar guayaberas a la población con un valor asequible.
"La hemos diseñado con toda una variedad de cuellos, escotes, mangas, sin bolsillos, más fresca y ajustada a estos tiempos, que ha llamado la atención de la juventud. Uno puede innovar, pero siendo muy respetuoso con los elementos de la prenda: los canesú, que es donde nacen y terminan las líneas de alforzas, los pliegues, la cantidad de botones, los bolsillos, los tipos de tejidos como el lino, el hilo y el algodón.
"Todo lo que realizamos es en función de ella, para darle ese lugar que lamentablemente se ha perdido". Y por tal sendero anda con su equipo, seguro de sí y de la importancia del empeño que lleva adelante.
