Las Tunas.- Las Tunas fue de los primeros sitios de Cuba en contar con una emisora de Radio. Y, tras cada una de las que le nacieron a esta comarca desde ese acontecimiento, se escurre una historia intensa, repleta de nombres y anécdotas que marcan la dinámica de un medio único, genuino y capaz, como ningún otro, de llevar hasta la gente su propia voz y contar en primera persona todos los matices.
Hoy, cuando el nacimiento de la 2LC de Luis Casas nos transporta a los inicios en el país de este aprendizaje a través del oído, les queremos rendir homenaje desde la foto y la referencia a una de aquellas pioneras, se trata de la CMKG Radio Tunas que, como rezaba su identificación, transmitía "desde Victoria de las Tunas, Balcón de Oriente, cuna de El Cucalambé".
Cuentan que la estación nació en Holguín, de allá la trajeron para que comenzara sus transmisiones desde los alrededores del parque Maceo; y hasta la Ciudad de los Parques volvió.
Luego, por obra y gracia de la voluntad popular y algo de ayuda del alcalde de turno, regresó a estas tierras para ser reinaugurada el 21 de septiembre de 1942 y enclavarse entonces al lado de lo que era el bar Las Arenas, a dos esquinas del memorable hotel Casino.
Tenía un equipo artesanal de 250 watts de potencia que, en el afán de convertirla cada vez más en profesional, incluyó al poco tiempo un equipo RCA llegado desde Camagüey gracias al cual alcanzaron los 500 watts. Luego, un técnico experimentado le puso dos bombillos y rozaron los mil watts. Aquello se escuchaba hasta Gibara de manera estable, sin interrupción.
Un muchacho que se llamaba Roberto abría la planta a las 5:00 de la mañana y las transmisiones cesaban alrededor de 13 o 14 horas después, con una programación de marcado corte cultural y publicitario que sacaba a la planta de sus locales y le daba vida a la ciudad.
Su dueño, Ramón Espinosa, quien alternó allí funciones de operador y locutor, también recorrió el país buscando talentos para engrosar el equipo de la CMKG.
Desde Sancti Spíritus trajeron a José Silveira, un lector de tabaquería con una voz envidiable que se mudó con su esposa a estos parajes; de Santa Clara vino Benito Pérez Limonta, con aquel timbre único para declamar poesías que enamoró a más de una, entre ellas, a la muchacha de la calle Villamar que se paseaba con su carro Mercury del 54 todos los días mientras él estaba en la cabina.
También de Jobabo les llegó el talento, con un locutor que asumió un programa de música clásica dos veces por semana, en el que se hablaba de Chopin y Beethoven por primera vez en la Radio tunera.
A veces se iban con la grabadora enorme para el portal de la tienda La Revoltosa, en lo que es hoy la tabaquería Enrique Casals, y se ponían a anunciar los productos disponibles. La gente que pasaba por ahí se llevaba, gracias a una entrevista, el gusto de salir por la Radio. Dicen que mucho aumentaban las ventas en esas fechas. También la tienda La Fortuna patrocinaba espacios al aire.
La emisora comenzó a transmitir en 1950 el noticiero La palabra, primer informativo radial en la historia del territorio tunero, realizado por el periodista Mario Torres López. El 14 de agosto de 1953, Radio Tunas se mudó para el edificio de Radio Cine, donde radica actualmente la sala teatro Raúl Gómez García.
Allí, con más de 300 lunetas de madera que se reclinaban en la planta baja y unas 40 en el piso de arriba hechas de muelles, mantenían una matiné al mediodía y otra tanda de cine a partir de las 8:00 pm.
Cuentan que Espinosa fue a ver a Oscar Varona, que tenía una lechería cerca de El Cornito, y le compró una nevera grande que él iba a desechar. La montó debajo del escenario, después de adaptarla, y logró que refrescara el lugar, porque no había aire acondicionado ni nada de eso.
También hablan de las noches de show. Primero, de Chaflán, el carismático locutor que era un as en todo eso de la comunicación y los chistes; y después, cuando este se fue para La Habana buscando otra fortuna, de la labor que siguió el Fígaro, un barbero medio amanerado que tenía el mismo don para los buenos espectáculos.
Radio Tunas estuvo activa hasta que la nacionalización la fundió con Circuito y nació la incipiente Cadena Provincial de Radio. Un mecanismo que ha ido encauzando sus pasos al calor de los tiempos, pero que sigue teniendo entre sus resortes la esencia de latir con la gente, desde sus espacios y visiones, para crecer.
