migdalia1

Las Tunas.- El Consejo Electoral Provincial confirmó a 26 que este domingo deben acudir a las urnas un total de 400 mil electores, repartidos en 668 circunscripciones, para dar su voto en el referendo del Código de las Familias. Entre los 266 mil locales dispuestos como colegios electorales, 63 están en viviendas particulares.

Ese caso se trata de vecinos que consideran vital apoyar el segundo proceso más importante en la historia legislativa del país de los últimos calendarios. En la ciudad capital tal respaldo resulta evidente.

"Esta es la primera vez que ofrezco mi casa para que funcione como comisión electoral, cuenta Nancy Gómez Castro -miembro del CDR 3, zona 104, en Alturas de Buena Vista. Yo ni siquiera me encontraba en la provincia cuando la propuesta, pero desde lejos di mi aprobación, porque ya no soy joven y hay algunas tareas que no puedo cumplir, pero otras tantas sí, como esta.

"Vivimos tiempos en los que debemos dar el paso al frente, y con este Código de las Familias demostraremos que sí podemos, porque está a favor de los que han sido menos beneficiados por décadas".

Mariblanca Ortiz, miembro del CDR 11 enclavado en la Zona 128, es otro de los ejemplos. "Llevo varios años brindando mi hogar para las elecciones, y esta vez es muy significtiva, no me podía negar, yo soy de las que piensa que el Código es un apoyo a mis derechos y un regalo a nuestras familias.

"También formo parte de la mesa electoral, siento doble compromiso, por tanto, debo hacer que en mi casa se respete la Ley Electoral".

Velar por estos centros especiales constituye responsabilidad del Grupo Comunitario. De ellos recibe aliento Yamila Viramontes, quien radica en Goicuría, entre Rafael Martínez y Estrada Palma, número 4.

"Hemos contado con esta vivienda en varias elecciones -explica Idalmis Velázquez Licea, presidenta del CDR. La persona que vivía aquí con anterioridad era el presidente del consejo popular, lo que facilitaba todo, ahora solo nos queda apoyar a la nueva propietaria, explicarle cómo funciona el proceso y, con su consentimiento, no romper la 'tradición'".

Así como Yamila, hay quienes son nuevos en un barrio y aún no están vinculados del todo a la faena cederista; ella no ve mal que continúen utilizando su morada en algo que al final es para beneficio de todos.

A Nancy, Mariblanca y Yamila las une el apoyo a la nueva normativa; ellas afirman que esta es la batalla de hoy, hacer ver al mundo cómo funciona la democracia cubana y el respaldo popular a la que pudiera ser una de las leyes más revolucionarias de América.

Escribir un comentario

Este sitio se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, que estén fuera de contexto o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social. Recomendamos brevedad en sus planteamientos.

Código de seguridad
Refescar