Indaya, un barrio que puede y debe ser mejor.
Indaya, un barrio que puede y debe ser mejor.

Las Tunas.- Los pobladores de Indaya quieren un barrio mejor. El lugar, con 264 viviendas, se encuentra en la periferia de la ciudad de Las Tunas y fue caracterizado como vulnerable. Entre sus más de 700 habitantes crecen las expectativas ante la posibilidad de resolver muchos de sus dilemas, a partir de la política del Estado cubano para la transformación de estos entornos, sustentada por el presupuesto territorial.

En noviembre del 2021, los moradores clamaban por un consultorio del médico de la familia, una tienda, una escuela, un área deportiva, el arreglo del camino principal y del puente (en peligro de derrumbe) que une a la zona con el Cigual. Además, solicitaban la atención a personas en diferentes situaciones, fundamentalmente a las madres solas con varios hijos.

En aquel entonces, Raúl Escobar, campesino al que todos conocen como Kilo, hablaba con conocimiento de causa sobre el estancamiento de la comunidad, desde su posición de nativo y el trabajo como delegado del Poder Popular durante dos mandatos. Para él, existían prioridades desde que era representante del Gobierno allí: además de la mayoría de los elementos referidos por sus vecinos, hablaba del Círculo Social, la farmacia, e insistía en el puente por el que se traslada la leche del Cigual hacia Indaya, y los caminos que comunican a ese paraje.

"Se ha hecho muy poco, la verdad", dice Kilo, mientras su mirada recorre parte de aquellos lares. "De la tienda y la farmacia no hemos tenido respuesta, y lo que se ha realizado es como para salir del paso, porque mire usted qué cosa más fea eso que hoy llamamos Círculo Social. ¡Está feo! Y el parquecito infantil puede tener más opciones".

 ¿Qué me dice del consultorio?

"Ese sí que está bonito, es chiquito, pero se hizo con buen gusto y la gente está muy contenta porque siempre tenemos ahí a la doctora y al enfermero".

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 El consultorio del médico de la familia saca la cara por Indaya, con su funcionalidad y belleza.
El consultorio del médico de la familia saca la cara por Indaya, con su funcionalidad y acabado.

¿Y qué hay de los jóvenes desvinculados del estudio y el trabajo?

"¡Uff! -dice con una mueca y vira la cara hacia un sitio impreciso. Este barrio está lleno y en eso no se ha profundizado prácticamente nada. Tampoco con las madres solas con tres hijos, dos de ellas viven en condiciones pésimas, una, incluso, en un cuartico forrado con nailon y yagua".

Lo que tratan de nombrar Círculo Social no es más que un techo de fibrocemento, en malísimo estado, con huecos, sustentado por unos palos horribles, como un insulto a la estética y las necesidades de todos allí. A su lado izquierdo, el parquecito infantil, un poco mejor, pero con carencia de equipos. Y a la derecha algo indefinido, como para vender viandas o productos comerciales.

 El círculo social es una muestra del mal gusto y la chapucería.
El círculo social es una muestra del mal gusto y la chapucería.

Aledaño se alista el estadio de pelota o beisbolito, donde laboran obreros de Mantenimiento y Construcción del Poder Popular en el municipio de Las Tunas, pero mandaron a detener la obra porque según el Departamento de Inversiones de la Dirección de Deportes, en la localidad, ahora no hay dinero para pagar lo que se hace.

¿Cómo es posible esa orientación, si el territorio cabecera tiene presupuestado para el 2022 más de 82 millones de pesos con destino a los barrios vulnerables y hasta julio solo se habían ejecutado poco más de 24 millones, lo que representa alrededor del 29 por ciento de lo planificado? ¿Cómo alguien puede encargar trabajos y después de culminados o a punto de estarlo decir que no hay capital para costear? En este sentido, es oportuno señalar que cada organismo dispone de su presupuesto aprobado para esas demarcaciones.

Sobre tales irregularidades, Martín Alberto García Peña, delegado de la Circunscripción 38, opina que se ha tratado de hacer algo, pero la calidad ha brillado por su ausencia en un porcentaje mayoritario.

 El parquecito infantil pudiera contar con más equipos.
El parquecito infantil pudiera contar con más equipos.

"En el caso del Círculo Social se discutió con sus ejecutores, los compañeros de la Agricultura, pero lo levantaron así porque decían que no tenían recursos; al igual que el punto de venta puesto por la Granja Urbana. El cuadro de pelota está más avanzado.

"Otro problema serio es la falta de legalización de los solares y las viviendas, suman más de 100 sin libretas de abastecimiento; unido al arreglo del puente y el muro de la presa, que constituye un gran peligro para las casas que están en los bajos de ese embalse", explica García Peña.

Del aula anexa a la escuela de Río Potrero, una de las solicitudes más sensibles, no se ha dicho palabra alguna. Los niños de Primaria tienen que ir a clases caminando más de dos kilómetros de ida y regreso, con los zapatos en la mano cuando llueve mucho, porque el fango se adueña del sendero y apenas pueden transitar, detalla Yuritza Zaldívar, la directora de la Sala de Televisión desde hace 21 años.

"A mí me da pena que presentan por la televisión tantas obras bonitas realizadas en otras comunidades como la nuestra, y aquí únicamente podemos hablar del consultorio", asegura.

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DOS HERIDAS PUNTUALES

De las viviendas de esta zona, exclusivamente 31 están en buen estado, 170 califican de regulares y 63 de malas. En ese panorama hasta hoy no se ha incidido. Y aunque es un asunto que se resuelve con suministros, se pudiera haber avanzado más a partir de soluciones alternativas.

Con relación a las madres solas, son varias las que necesitan ayuda de inmediato. En esa lista está Yusmary Rivas Rojas, joven con tres hijos: un varón de 10 años de edad, y dos hembras, de 8 y 7.

 Yusmary sueña con una casita humilde, pero con condiciones para vivir con sus tres hijos.
Yusmary sueña con una casita humilde, pero con condiciones para vivir con sus tres hijos.

Donde vive Yusmary había un hueco que ella rellenó y construyó una pequeña morada, con un cuartico y la cama donde duerme con sus niños. Una cocinita y paredes de yagua y nailon completan sus dominios. El techo se lo regaló un vecino. Todo ha sido con el auxilio de sus padres.

"Es cierto que por Seguridad Social me han respaldado con algunos recursos, y eso lo agradezco, pero nadie me ha dicho que me ayudarán a levantar mi casa, no importa que sea de madera y guano, me conformo con un lugar donde vivir con mis pequeños. He trabajado, pero en centros alejados; ahora me han propuesto cuidar a una familia en Río Potrero, y resulta que falta un papel que no acaba de aparecer.

"Sin embargo, lo que me afecta seriamente es la falta de la libreta de abastecimiento. Yo no tengo la canasta básica aquí, porque debo ir a Vázquez, y a mis hijos muchas veces no los mando a la escuela porque no tienen desayuno ni merienda, es triste que estén en el colegio y mientras otros niños meriendan ellos no lleven nada para comer. Hoy fueron, por ejemplo, porque me prestaron 40.00 pesos y compré unos panes. Yo pregunto, ¿para que me den la libreta hacen falta recursos?

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¿ENTONCES?

Si Indaya clasifica como vulnerable por el Gobierno, requiere la atención pactada. Sus habitantes lo dicen una y otra vez, y aunque se sintieron muy motivados cuando se les comunicó por las autoridades los planes trazados, ahora esperan las transformaciones con cierto recelo, porque apenas ven avances en los proyectos y en el cumplimiento de sus anhelos.

A eso se suma la chapucería en lo que se ha "concretado", lo cual es responsabilidad no solo de quienes han impulsado las obras, sino, en primer lugar, del Grupo de Trabajo Comunitario, que tal parece ha cerrado los ojos ante lo mal hecho.

Las acciones que se desarrollan para la transformación de los barrios considerados vulnerables tienen
un carácter integral y permanente, afirmó en julio pasado Miguel Díaz-Canel Bermúdez, primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República.

Al tiempo que señalaba lo que debía ser, enfatizaba en que esos pasos son expresión de la continuidad del pensamiento del líder revolucionario Fidel Castro Ruz, quien en sus visitas a sitios semejantes constató las fragilidades y potencialidades para el mejoramiento de las condiciones de vida de la población. Díaz-Canel apuntaba la pertinencia de perfeccionar métodos de participación y control popular para garantizar el éxito de tantos esfuerzos.

Todo eso está fallando en Indaya.

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