Pichuli el domador de caballos 4 caminos foto migueldn

Las Tunas.- Desde que nació le pusieron Pichuli, y por eso nadie lo conoce como Esmérido Romero Vargas, un domador de toros en sus inicios y ahora de caballos que se pasea orondo a la vista de toda la comunidad de Cuatro Caminos.

- Todavía me trepo en los palos y me subo a las matas de coco.
- ¿Y es verdad que corres caballos?
- Bueno, ahora en días corrí dos o tres que estaba domando -y ríe como un muchacho chiquito.
- ¿Nació en esta tierra?
- Sí, aquí en Cuatro Caminos.
- Cuénteme cómo empieza a domar caballos.
Pichuli el domador de caballos 4 caminos foto migueldn 2- Tendría unos 18 años de edad. Yo los cogía y los amarraba porque antes no se trancaban, se domaban en el potrero. Pero ya no, ahora les pego la montura, comienzo sobrellevándolos, que no brinquen, hay que pasarles la mano, bañarlos, darles peine y tratarlos como a una niña, como a una "jeva", no castigarlos mucho porque eso es domarlos. No los voy a matar ni a sacrificar pa' eso. Es al pasito. Los enseño a caminar, después a trotar, si un día un galope, se los echo.

- ¿Cuántos caballos ha domado?
- ¡Uff! Unos cuantos. No sé, no sé.
-¿Qué siente cuando ya los doma?
- ¿Eh? Mira, tú sabes que cuando yo iba a montar un toro malo de esos, yo sentía que me ponía nervioso, pero ya cuando hacía contacto con él me sentía como esta mampostería -le da con el puño a la pared. Me sentía firme, completo y brinca toro y brinca toro. Yo he monta'o caballos que los bolíos los han pega'o al cielo, han grita'o como un lechón, y yo ahí. Pero bueno, por eso yo he lleva'o 16 fracturas en los huesos, montando toros y caballos.

En más de 50 años domando animales, Pichuli ha tenido momentos difíciles y tristes, y en ocasiones estuvo muy cerca de la muerte por la fuerza de los toros y caballos que por instinto se defienden de sus jinetes.

"Bueno, una vez me monté en un caballo con una monturita pa' no 'embromar' la nueva, y la montura no estaba en buenas condiciones y brinca y brinca y los corcoveos que echaba. Me fui a tirar y se me fue la pierna por el estribo y me dio dos o tres vueltas por el potrero conmigo a rastras, ¡uuu! y yo guindando ahí, ¡uuu! a velocidad. Y entonces cuando resbaló, y se fue de patines yo pude sacar mi pierna, pero me lastimó el tobillo. 

"Estuve como cinco o seis meses que to' los días había que ponerme cosas porque lo que botaba por el tobillo… ¡Ah!, no me mató no sé cómo, si me coge un troncón por la cabeza me mata. Lo que pasa es que la tierra estaba blandita. Pero me puso tonto, me zarandeó. 

"¡Ah!, y otra vez que estaba domando uno que era vago, grande, y entonces iba a llevar una novilla tres cuartos y había una estrechez en el camino, y la bestia no quería caminar. Vino Ibis, el veterinario, y le dio con un alambre de puya por el lomo y aquel animal se mandó y no me dio tiempo a nada porque el caballo era muy sinvergüenza. Me arrastró por las dos piernas y me zafó esta rodilla, estuve seis meses y 24 días con yeso puesto, pero quedé bien".

- Pero así sigue entonces.
- ¿Eh? Sí, sí, así sigo yo haciendo…
- ¿Y hasta cuándo?
- ¿Eh? Hasta que Dios quiera…hasta que Dios quiera.

Pichuli, con sus 75 años, su figura de Quijote y sus 16 fracturas como trofeos, es un símbolo entre los campesinos de la cooperativa de créditos y servicios Carlos Manuel de Céspedes, de Cuatro Caminos, en la provincia de Las Tunas. Y le muestran su respeto cuando lo ven pasear orondo y orgulloso encima de esos animales que doma; y él permanece con su estima por las nubes porque sabe que a sus años en toda la región no hay un domador de caballos como él en eso de hacerlos entrar por el aro.

 

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